Vas adelantando y, de repente, un radar te obliga a frenar, ¿te pueden multar? Pues sí, de hecho no sería la primera vez que la Guardia Civil de Tráfico se aposta en las inmediaciones de un punto de control de velocidad para sancionar a los conductores que comenten imprudencias.

Es más, la cercanía de un punto de control fijo -y ya ni digamos uno móvil- es una zona en la que todos los conductores debemos extremar la atención, disminuir la velocidad y aumentar la distancia de seguridad porque siempre hay quien, sobresaltado por la circunstancia, puede frenar ante el radar. 

No puede decirse que los radares generen accidentes porque la responsabilidad es de los conductores siempre, a pesar de ello, algunos se convierten en el mejor aliado de los chapistas. En todo caso, recalquemos, el conductor debe llevar siempre la velocidad adecuada y no realizar maniobras buscas en ningún caso. 

Es una sanción grave

De lo contrario, por ejemplo al frenar ante un radar de velocidad, según el artículo 53 del Reglamento de Circulación, incurrirá en una imprudencia grave, que se sanciona con 200 euros y la pérdida de cuatro puntos, siempre y cuando la maniobra no concluya en un accidente, cosa que siempre agrava las consecuencias. 

Así, para evitar la multa de frenar ante un radar lo aconsejable es aminorar la velocidad, ya que aunque vayas respetando el máximo siempre hay quien prefiere pasar por debajo 20 km/h más despacio 'para asegurar'. 

En caso contrario, si un Guardia Civil te ve frenando con brusquedad de día o con la luz de freno encendida de noche, la multa te la puedes llevar. Y es más, será merecida, pues ¿no es más peligroso frenar ante un radar de manera brusca que un ligero exceso de velocidad?