El vehículo del vídeo no es un deportivo, aunque lo parezca, es un camión ruso al que le han puesto un turbo y muchos caballos de más… ¡Pura potencia encerrada en más de cuatro toneladas! 

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Esto sólo podría suceder en Rusia. En otros lugares, los fans del motor modifican sus deportivos para convertirlos en coche más rápidos y prestacionales. Allí, se dedican a preparar camiones antiguos con motores V8 y un nuevo turbo que ofrecen una respuesta realmente espectacular. Una mole muy potente. 

Los camiones en Rusia 

Esta unidad es un ZIL-130, un antiguo modelo ruso que, en su producción, lo último para lo que fue creado era para ser deportivo. Con una estética de otra época, unas dimensiones que incitan poco a tomar las curvas al límite y un peso que más bien sirve para remolcar y llevar cargas que marcar 0 a 100 km/h en pocos segundos. 

Pero la magia de la mecánica es así. A este bloque le han equipado con un motor V8 de 4,4 litros TwinPower Turbo heredado de un BMW X5. Este propulsor, ha sido sobrealimentado para entregar 700 CV de potencia que se reparten a las cuatro ruedas de este enorme camión. 

Para completar está transformación, a está bestia rusa de 4,3 toneladas se le ha dotado, a su vez, de la caja de cambios automática ZF del BMW e incluso el volante de la marca alemana, que se puede apreciar perfectamente en el vídeo. Se ha acortado la batalla del camión y se le han incorporado algunos detalles como una zaga con nuevas protecciones. 

Imaginad lo que han pensado el resto de los coches de la carretera cuando les ha pasado un ZIL-130 de color azul clarito a toda velocidad por la izquierda, con un empuje descomunal más propio de un coche de otras características. Esto, como de costumbre… sólo pasa en Rusia.