Max Verstappen nos ha demostrado en los años que lleva en la Fórmula 1 que es capaz de lo mejor cuando está al volante, pero también de lo peor cuando se enfada. En Portugal, durante los segundos entrenamientos libres, pudimos verlo. Al holandés no le gustó lo que le sucedió en la pista y, fruto de su enfado, acabó insultando a Carlos Sainz y a Lance Stroll.

Verstappen ha sido el protagonista negativo de los segundos entrenamientos libres del Gran Premio de Portugal de F1, donde además de verse involucrado en un accidente con Lance Stroll, el piloto holandés acabó insultando a todo el piloto que no reaccionó sobre la pista como él quería que hiciera. A través de la radio, tras el toque con Stroll, Max se despachó a gusto:

"¿Está ese tío ciego? ¿Qué coño está haciendo? ¡Jesús!... es un retrasado. Tengo el coche dañado. Qué mongol. Lo juro", dijo Verstappen, según reproduce la web 'Motorsport.com'. Unos comentarios que, sin duda alguna, no deberían ser realizados por un piloto de la categoría reina del automovilismo, seguido por millones de personas y también idolatrado por jóvenes que comienzan a competir.

Pero no solo fue esto. Al inicio de la sesión, Verstappen también insultó a Sainz, que bloqueó frenos delante de él. Le llamó "gilipollas", según la edición española de la web Motorsport. 

Max Verstappen no es, ni mucho menos, ejemplo de conducta deportiva por comentarios o acciones de este tipo. En 2016, el de Red Bull ya llamó "mongol" a Garry Connelly, comisario de la FIA, cuando perdió un podio por sanción. También podemos recordar cuando empujó a Esteban Ocon en el pesaje de la FIA tras el incidente en el que ambos se vieron involucrados en el Gran Premio de Brasil de 2018.

Cuando le preguntaron a Max si podría haber ofendido a alguien con sus comentarios, dijo "no es mi problema", aunque momentos más tarde dijo que no quiso ofender ni molestar a nadie.

A pesar del accidente con Stroll, Verstappen ha acabado la jornada de entrenamientos en Portugal en una buena segunda posición, no demasiado lejos de Valtteri Bottas, líder de los Libres 2. Sobre la pista, con el casco puesto, Max es invencible... Lástima que su personalidad no esté a la altura del gran piloto que es.