5 Porsche con el motor bóxer de 4 litros como los nuevos 718 GTS. ¡Salvajes!

Porsche 911 GT3 RS 4.0
Lo mejor de lo mejor en Porsche.

Porsche es una marca especialista en crear coches deportivos con alma. Los Porsche con motor bóxer de 4 litros tienen algo en común: sensaciones para puristas, sabor añejo, sonido demencial, altas revoluciones. Con el paso del tiempo se han convertido en auténticos objetos de deseo que han utilizado una configuración mecánica especial que ahora llega a gamas más allá del poderoso Porsche 911.

Y es que el Porsche 718 Boxster y Cayman GTS han dado la campanada al incluir un propulsor hasta ahora reservado a Porsches 'pata negra'. Un motor atmosférico, de la vieja escuela, capaz de subir de vueltas con brío y acompañado de una melodía increíble. Sensaciones puras que a partir de ahora, los usuarios de los nuevos Porsche 718 GTS, compartirán con los afortunados propietarios de estas cinco joyas que te dejo a continuación. 

¡5 Porsche con el motor bóxer de 4 litros!

Porsche 997 GT3 RS 4.0

Porsche 911 GT3 RS 4.0

Fue el primero Porsche de calle en utilizar el propulsor bóxer de seis cilindros y 4 litros procedente del Porsche 911 RSR de competición. Un motor explosivo capaz de rodar por encima de las 8.000 vueltas y que pretendía convertirse en la punta de lanza de las versiones más deportivas y pasionales del fabricante alemán.

En el caso del Porsche 911 GT3 RS 4.0, llegó en forma de edición limitada, ya en el tramo final de la comercialización de la generación 997. Con 500 CV y un cambio manual de seis velocidades. Su diseño exclusivo, más racing que nunca, enamoró a los aficionados de la marca, que literalmente se pegaron bofetadas para conseguirlo. Limitado a solo 600 ejemplares, nació clásico desde el primer día y hoy en día su cotización sigue al alza.

Porsche 991 GT3 RS

Porsche 911 991 GT3 RS

El primer Porsche 'normal' en montar el motor bóxer de 4 litros fue el Porsche 991 GT3 RS. Aunque eso de 'normal' necesita más de dos comillas. Hablamos del mismo bloque heredado por su antecesor, con los mismos 500 CV bajo el pedal derecho y un par de 460 Nm. La principal diferencia respecto al GT3 RS 4.0 era la incorporación de una transmisión automática de doble embrague PDK, con el que los tiempos de aceleración mejoraron notablemente: era capaz de alcanzar los 100 km/h desde parado en 3,3 segundos.

Mención especial merece el Porsche 911 R, que básicamente es el mismo coche, pero con cambio manual, una estética más clásica sin alerón y un peso de solo 1.370 kilos. ¡Producido en edición limitada, su precio se fue por las nubes en el mercado del coleccionismo!

Porsche 991.2 GT3

Porsche 911 991 GT3

El restyling del Porsche 911 991 llegó con una versión GT3 cuyo motor crecía de cilindrada, desde los 3,8 litros hasta los 4 litros. Básicamente, el motor del Porsche 991.2 GT3 era el mismo que el del GT3 RS, capaz de alcanzar las 9.000 vueltas en un autentico espectáculo de prestaciones y sonido. La principal novedad era la posibilidad de poder equipar un cambio manual de seis marchas en la versión GT3 Touring. Poco después llegó al versión GT3 RS, con piezas de competición y una potencia que alcanzaba los 520 CV.

Porsche 991 Speedster

Porsche 911 Speedster

El último Porsche 911 en llegar con este motor fue el fantástico Porsche 911 Speedster, único descapotable en montar esta joya de la ingeniería hasta la llegada del Porsche 718 Spyder GT4, aunque con un motor ligeramente diferente. El Porsche 991 Speedster no era otra cosa que un GT3 con carrocería descapotable de tipo speedster. Si escuchar este propulsor gritando a 9.000 vueltas ya era un placer en cualquier momento, imaginad sin techo, con unos decibelios entrando en el habitáculo de una manera mucho más nítida. ¡Espectacular!

Porsche 718 Cayman GT4

Porsche 718 Cayman GT4

Porsche sorprendió al mundo incorporando un nuevo motor bóxer de 4 litros en la nueva generación del Porsche 718 Cayman GT4 y en el Porsche 718 Boxster Spyder. Dos vehículos absolutamente apasionantes y pensados para disfrutar al volante. Exigentes y capaces de emocionar, aunque con un propulsor ligeramente diferente: homologado para la normativa Euro 6d y con una línea roja a 8.000 vueltas. El motor es una evolución del 3.0 litros del Porsche 911 Carrera, aunque con cilindros más grandes (compartiendo diámetro y carrera con los del 911 GT3) y sin sobrealimentación.