Siete datos curiosos del Mercedes Clase A

Mercedes Clase A (W168)

Es un coche más interesante de lo que parece

El Mercedes Clase A es uno de los modelos más exitosos de la marca alemana en la actualidad, así como uno de los compactos premium más populares. Cuenta con multitud de versiones y también con una historia plagada de datos interesantes.

Y es que este modelo de Mercedes tuvo un nacimiento peculiar, mucha innovación y un cambio completo de personalidad. Por ello, hoy os traemos siete datos curiosos sobre él.

Tiene ya 4 generaciones

Mercedes Clase A (W169)

El Clase A se lanzó al mercado en 1997 y desde entonces ha contado con cuatro generaciones. Se trata de la W168, la W169, la W176 y la actual W177. En cualquier caso, la primera fue la más llamativa, tanto por su peculiar estilo como por los avances técnicos que presentaba para la época.

Ahora, estamos ante un modelo no tan revolucionario, pero con muchos puntos positivos que han jugado a su favor en cuanto a su popularidad. Ofrece todo tipo de variantes, desde algunas más enfocadas en la eficiencia hasta otras destinadas a la deportividad.

En 2011 cambió por completo

Diseño del Mercedes Clase A (W176)

Ahora conocemos a este modelo como un compacto del segmento C, pero no siempre fue así. En las dos primeras generaciones, el Clase A era un pequeño monovolumen del segmento B, pero se decidió cambiar su identidad. 

Se podría decir que, en el 2011, este coche renació por completo, ya que poco o nada tenía que ver ya con el concepto original. Eso sí, es innegable que su versión actual está funcionando bien en el mercado.

Podía volcar en la prueba del alce

La primera generación es la más famosa, en parte por un suceso peculiar. Cuando se presentó, algunos medios especializados pudieron hacer distintas pruebas y una de ellas era la del alce. En ella, se emula una maniobra de esquiva de emergencia que puede ser necesaria si se nos cruza un animal en la carretera.

El periodista sueco Robert Collin fue el encargado de hacerla, pero el resultado no fue el esperado. Al hacer la maniobra, el coche levantó dos de sus ruedas y estuvo a punto de volcar, de manera que esto afectó a la opinión de los compradores potenciales.

Fue el primero de su segmento en llevar ESP

El Mercedes Clase A (W168), tras recibir el ESP.
El Mercedes Clase A (W168), tras recibir el ESP.

Sin embargo, como se suele decir, no hay mal que por bien no venga. Aquel incidente hizo que Mercedes modificara el coche para evitar este suceso, de manera que se cambió la medida de los neumáticos, se endureció la suspensión y se incorporó el control de estabilidad (ESP)

Con estos cambios, el coche ya no volvió a sufrir este riesgo y se convirtió en uno de los más avanzados de su tipo. Y es que la inclusión del ESP era algo muy llamativo, ya que jamás se había visto en un coche de su segmento.

El curioso ‘concepto sándwich’

Concepto 'sandwich' de seguridad en el Mercedes Clase A (W168)

El ESP no fue lo único revolucionario del primer Clase A. Una peculiaridad de este modelo es que incorporaba una solución para evitar que el motor fuese empujado hacia el habitáculo en caso de colisión frontal. La idea estaba clara: el motor, la transmisión y el eje delantero se colocaba más abajo de lo normal y ligeramente hacia el lado del pasajero. 

¿Por qué? Debajo de este asiento se encontraba un compartimento. Así, el diseño del chasis hacía que, en caso de un golpe frontal, todos estos componentes eran empujados hacia esta zona. De esta forma, el motor y la transmisión quedaban bajo los ocupantes, garantizando su seguridad a pesar del corto capó del pequeño monovolumen.

Daimler ha llegado a perder 1.440 euros por coche

Mercedes Clase A (W168)

Antes de evolucionar hacia un modelo compacto, este Mercedes no logró el resultado que se esperaba en el mercado. Los problemas de seguridad iniciales fueron un inconveniente y tampoco parecía lograr una gran acogida entre el público.

Esto le hizo entrar en el top 10 de coches que han supuesto pérdidas de dinero a sus fabricantes, según Bernstein Research. Tal y como se detalla en el análisis, entre 1997 y 2004, cada unidad de este modelo supuso una pérdida de 1.440 euros a Daimler. En total, la pérdida fue de 1,71 billones.

El AMG 45 S es el cuatro cilindros más potente del mundo

Mercedes Clase A 45 AMG S

El Mercedes A 45 AMG es la versión más radical de este modelo y la marca alemana quiso ir un paso más allá en el 2019. Con la variante ‘S’, este coche ofrecía 421 CV de fábrica, lo que le situó muy por encima de sus competidores. En definitiva, es un coche muy emocionante que nos sorprendió cuando lo probamos.

Esto le ha hecho ganarse la corona del rey de los compactos deportivos -y de los coches con motor de 4 cilindros-, al menos en cuanto a potencia. No hay otro que le iguale y, gracias a su tracción integral y a su caja de cambios de doble embrague, sus cifras son muy respetables. En 3,9 segundos es capaz de pasar de 0 a 100 km/h y su velocidad máxima es de 270 km/h.