El Aston Martin Valkyrie, ya en carretera abierta. ¡De locos!

Aston Martin Valkyrie calle
Entre el tráfico todavía se ve más espectacular.

El Aston Martin Valkyrie ha empezado sus pruebas en carretera abierta y después de verlo entre el tráfico ya no tengo duda: será uno de los hiperdeportivos de la década. Desafortunadamente, Aston Martin no está pasando un buen momento a nivel financiero y una de las consecuencias es que el Valkyrie finalmente no estará en Le Mans 2021. Bueno, pierde algo de 'pedigree' de competición pero eso no quita para que sea uno de los coches deportivos más increíbles. 

Como lo fuera el Lamborghini Miura en su día o el Ferrari Enzo a comienzos del Siglo XXI, el Aston Martin Valkyrie se ve como una auténtica nave especial entre el resto de coches. Un coche esculpido para cumplir una función aerodinámica clave y que tiene uno de los aspectos más afilados y espectaculares que hemos visto en la historia de la automoción.

Las imágenes que vas a ver en la galería, de uno de los primeros Aston Martin Valkyrie de pre-producción que pisan el asfalto, no es otra que demostrar que estamos ante un coche capaz de moverse también lejos de un circuito, aunque su aspecto nos haga pensar justo lo contrario. Es un nuevo paso en el desarrollo técnico de un deportivo que llegará a sus afortunados propietarios a lo largo del año.

"Siguiendo el desarrollo del Aston Martin Valkyrie, una vez completados los test en circuito, el coche se enfrenta a la carretera abierta en los alrededores de Silverstone, donde el equipo de Aston Martin y de Red Bull Advanced Technologies empezarán los test en un mundo real, paso previo a empezar las entregas a nuestros clientes." Comentaba un portavoz de la marca.

Con un motor V12 desarrollado por Cosworth y 1.130 CV y tecnología híbrida desarrollada por Rimac, esta bestia apenas pesa 1.030 kg gracias al uso de materiales ligeros y a tecnología derivada directamente de la Fórmula 1. No olvidemos que genios como Adrian Newey, del equipo Red Bull de F1 están detrás de este proyecto increíble.

Se fabricarán 150 ejemplares a razón de unos 3 millones de euros cada una. Además, su exclusividad es tal, que Aston Martin ha prohibido poder vender el coche al poco de recibirlo: si lo hacen, dejarán de formar parte de la élite clientelar de la marca. ¿Quién en su sano juicio querría vender una maravilla de la tecnología como esta? En carretera abierta, el Aston Martin Valkyrie todavía se ve más espectacular. ¡Estamos deseando verlos en acción!