Esta es la llave de velocidad del Bugatti Veyron para alcanzar los 407 km/h

Llave velocidad Bugatti Veyron
El coche más rápido de su tiempo cumple 15 años.

La llave de velocidad del Bugatti Veyron para ir a 407 km/h fue una de las características más curiosas de uno de los coches deportivos más impresionantes de la historia. El objetivo era crear el coche más rápido del mundo, por eso, hace 15 años (cómo pasa el tiempo) un Bugatti Veyron alcanzó los 407 km/h en el Circuito de Ehra-Lessien, en Alemania. Un hito que convirtió a este Bugatti súper GT en el coche más rápido de la historia.

Se dice que esa cifra, 407 km/h, no es casualidad. Es 1 km/h más que la velocidad máxima conseguida por el impresionante Porsche 917 en la recta Hunaudières en las 24 horas de Le Mans. Este bólido de competición fue desarrollado por Ferdinand Piëch, padre del Veyron y mandamás del Grupo Volkswagen en esos días. Su objetivo, su sueño, era crear un GT de lujo capaz de superar la velocidad máxima de un coche de carreras en Le Mans. 

Llave velocidad Bugatti Veyron

Los 406 km/h del Porsche 917 rápidamente quedaron reventados en el Circuito Ehra-Lessien, una cifra que muchos consideran que era, en realidad, bastante superior. Finalmente se homologó esa cifra muy representativa de una voluntad. Ahora bien, para alcanzarla, había que hacer todo un ritual, protagonizado por la llave de velocidad del Bugatti Veyron. 

La llave de la velocidad

Y es que la velocidad máxima del Bugatti Veyron estaba limitada a 380 km/h, una cifra que ya puede dar miedo, mucho miedo. Para poder superar esa cifra y no morir en el intento, se necesitaba acoplar una segunda llave. La llave de la velocidad del Bugatti Veyron. Superar los 400 km/h de velocidad máxima es todo un reto a nivel técnico y esta llave se encargaba de configurar un setting específico de alta velocidad.

Llave velocidad Bugatti Veyron

¿En qué consistía? Al insertar esta llave, el ordenador central del Bugatti Veyron realizaba ciertas comprobaciones técnicas, como la presión de los neumáticos. También bajaba la suspensión desde los 125 mm a los 65 mm en el eje delantero y 70 mm en el trasero, para mejorar la aerodinámica. El alerón trasero también bajaba hasta inclinarse solo dos grados y los flaps se cerraban para reducir al máximo el coeficiente de arrastre.

Gracias a todos estos elementos, el Bugatti Veyron era capaz de superar los 400 km/h con seguridad. Con el paso de las semanas, el Veyron demostró ser una bestia brutal. El 19 de abril de 2005, el piloto de pruebas Uwe Novacki alcanzó los 411 km/h, aunque el marcador instalado en el circuito mostró unos espeluznantes 427 km/h. Finalmente, los encargados de homologar la velocidad máxima solo pudieron demostrar los 407 km/h, por lo que esa fue la velocidad máxima oficial del Bugatti Veyron. ¡Un coche que cambió la historia de los hiperdeportivos!