Un Honda NSX. Poco respeto a los semáforos. ¡Dolor!
Este accidente de un Honda NSX te va a doler en el alma, aviso. Un coche como este no debería poder tener accidentes nunca, pero a veces las desgracias ocurren, aunque en la mayor parte de las ocasiones, sobre cuatro ruedas, hay un responsable de dos patas. En este caso, podría haber hasta dos responsables. Lo mejor es que veas el vídeo y saques tus propias conclusiones, no será fácil saber quién tiene la culpa en este desaguisado.
Y es que me parece que ambos son responsables de este follón. Estamos en una intersección, en la que ambos tienen prisa y, por todos es sabido, que las prisas no son buenas consejeras. Seguramente el Honda NSX salió antes de ponerse la luz verde en marcha, mientras que el Lexus probablemente ya cruzó su semáforo en ámbar o incluso en rojo. Las ganas de llegar antes que nadie terminó que los dos coches no vayan a llegar al destino. Triste y estúpido.
Y es que amigos, no hace falta arriesgar de esta manera. El impacto entre ambos vehículos es fuerte y a buen seguro se traducirá en una factura muy alta en el taller. Afortunadamente, el Honda NSX tiene el motor en posición central trasera, por lo que el impacto en el frontal necesitará un buen repaso en el taller y una factura holgada, pero podrá seguir circulando. El Lexus, con unos cuantos años encima, lo tendrá más complicado para ser reparado.
En definitiva, una vez más, ya son muchas: ¡las prisas no son buenas! Mira el accidente de este BMW Serie 3 que terminó a dos ruedas. Es otro buen ejemplo.