Prueba BMW M3 Competition y M4 Competition Coupé: ¡menuda salvajada!

Prueba BMW M3 y M4 Competition

Olvídate de la parrilla, lo que hay detrás hace que estos M3 y M4 Competition sea la berlina deportiva más completa a la venta en la actualidad.

Ya hemos puesto a prueba el nuevo BMW M3 Competition (G80) y también a su hermano de tres puertas, el BMW M4 Competiton Coupé (G82). Sigue apostando por el mismo motor biturbo de seis cilindros en línea, sigue siendo de propulsión trasera (a partir del verano también habrá versiones xDrive) y sigue siendo un mito rodante. Pero no todo es igual. 

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La primera de las novedades es la caja de cambios automática por convertidor de par de ocho velocidades, que reemplaza de manera controvertida al doble embrague de siete velocidades y que, según BMW aporta mayor agrado de uso y fiabilidad, ya que el doble embrague y tanto par no se llevan bien. Y si te preguntas por el cambio manual, actualmente sólo se ofrece uno de seis velocidades con el M3 normal, el no Competition, que tiene 480 CV y, por lo que parece, no se venderá en España. 

También cambian las dimensiones, porque ahora es 120 mm más largo y 20 mm más ancho que antes.

Sus rivales son modelos de la talla del Alfa Romeo Giulia Quadrifoglio, que ya empieza a verse un tanto anticuado; el Audi RS4 actual, que no es un coche tan redondo; y abundan los rumores de que el próximo C 63 AMG de Mercedes reducirá a la mitad su número de cilindros y se convertirá en híbrido. Así que este BMW parece que se postula como la referencia en este segmento.

¿Mismo motor? Sí, pero con muchos cambios

Esta es la sexta generación del BMW M3, un exitoso linaje que comenzó en 1986. Al principio apostaba por un motor de cuatro cilindros atmosférico y, al margen de una incursión en los motores V8 hace un par de generaciones, siempre ha apostado por bloques de seis cilindros en línea desde entonces.

BMW M3 Competition motor

El motor usa la misma base de seis cilindros, pero se han introducido numerosos cambios. Sí, este bloque S58 es un desarrollo del antiguo B58, pero el árbol de levas se ha tomado prestado directamente del modelo de carreras, el BMW M4 GT3, los dos turbos son nuevos y más grandes y la culata está impresa en 3D, lo que le permite hacer frente a presiones de inyección de hasta 350 bares. El resultado de todas estas mejoras son 60 CV extra de potencia 100 Nm de par, respecto al M3 Competition anterior. Así que declara 510 CV y 650 Nm de par.

El problema es que tiene arrastrar más peso que antes, ya que en la báscula marca 1.730 kg, es decir, más de 150 kg más que su predecesor, el M3 F80, lo que le otorga sólo una ligera ventaja en la relación peso/potencia y una mejora en el 0-100 km/h de sólo 0,1 segundos, es decir, 3,9 segundos en total. 

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Según BMW el incremento de peso se debe a su mejor equipamiento de serie. Y, sin duda, el nuevo M3 está bien equipado, ya que incluye maravillas como el nuevo sistema M Drive Professional, una opción concebida específicamente para la conducción en circuito, que incorpora el nuevo control de tracción M con hasta 10 niveles de configuración posibles de más amenos restrictivo. Otros elementos del M Drive Professional son el Analizador M Drift, que registra y califica las estadísticas conseguidas en las curvas más dinámicas, y el M Laptimer, que cronometra los tiempos por vuelta y otra información obtenida durante las sesiones en circuito. Tres virguerías de las que absolutamente nadie más puede presumir.

BMW M4 Competition Coupé detalle interior

¿Más detalles específicos de equipamiento? 

Las luces LED son de serie, monta un cuadro de mandos de 12,3 pulgadas y otra pantalla táctil central de 10,25 pulgadas para el sistema de infoentretenimiento. Además, climatizador de tres zonas, equipo de sonido Harman Kardon con 16 altavoces, control gestual y tres paquetes de equipamiento que sólo los más elitistas sabrán apreciar: M Carbon (6.000 euros), con accesorios exteriores e interiores de fibra de carbono; M Race Track (26.950 euros), con bacquets deportivos, delimitaci´n de velocidad, Head-up display, frenos carbocerámicos...; y el paquete Technology (3.800 euros), con luces láser y todo tipo de asistentes de seguridad.

BMW M4 Competition interior

Aunque el coche es más pesado, hay mucha fibra de carbono de serie, desde el techo, hasta el volante, pasando por la consola central y las levas de cambio. Y si lo que deseas es ahorrar peso a toda costa, siempre puedes montar los discos de freno carbocerámicos, que ahorran 15 kg, a pesar de ser más grandes (discos delanteros de 400 mm de diámetro, contra 380 mm del modelo de serie), así como los asientos deportivos tipo bacquets, que ahorran unos 10 kg por unidad. 

Prueba dinámica del BMW M3 Competition

Te estoy contando muchos datos, pero casi estoy pasando por alto hablarte de mis sensaciones al conducirlo. Pero tranquilo, te las cuento ahora mismo:

El motor es salvaje, su empuje te deja con la boca seca y te hace olvidar que está un poco entrado en carnes, porque gana velocidad de tal manera que no entiende de sobrepeso. Sobre la caja de cambios ZF de convertidor de par no puedo más que piropearla. En absoluto echo en falta el cambio de doble embrague, pero también es cierto que soy un fan incondicional de esta transmisión, porque me parece más suave que una de doble embrague y prácticamente igual de rápida tanto al subir como al bajar de marcha.

De serie monta neumáticos de 18 pulgadas delante y 19 detrás, algo que, según los ingenieros de BMW, mejora el agarre y la tracción del eje delantero, al contar con algo más de goma delante. Lo cierto es que no he tenido opción de comparar ambas opciones ni creo que lo hubiera notado. Pero lo importante es que el coche tiene un paso por curva bestial, tanto en giros enlazados de radio amplio, como en curvas más cerradas.

Y algo que creo que hay que destacar es que cuando pones a prueba el nuevo BMW M3 Competition es inevitable no sentirse piloto, porque te ofrece tantas posibilidades de configuración del chasis y de la electrónica que al principio te sientes hasta abrumado. Por destacar las dos funciones más importantes, tienes el sistema M Mode, que ajusta los aistentes a la conducción y las pantallas de la para ofrecer una experiencia adaptada a cada situación de conducción, según los modos Road, Sport y Track; y luego está el botón Setup, que permite configurar motor, chasis, dirección y sistema de frenos, además (según la versión y especificaciones), al sistema M xDrive (disponible a partir del próximo verano) y el control de tracción.

Coches deportivos

Coches deportivos

Los coches deportivos nos hacen soñar despiertos: grandes prestaciones, promesa de sensaciones al volante, de una conducción sin igual. Los hay grandes, pequeños, bonitos, feos, caros y baratos. Pero todos ellos tienen en común una cosa: si merecen la pena, están aquí. ¡Sigue el link!

Para terminar, no puedo dejar de mencionar una pincelada sobre los asientos opcionales tipo bacquet: no sólo ahorran peso y tienen una estética espectacular, sino que son hasta cómodos. Y no es sólo una sensación. Es algo que puedo confirmar tras haber hecho unos 400 km al volante del BMW M3 Competition.

¿Me ha gustado el nuevo BMW M3 Competition?

Desde luego que sí. Como te decía antes, es una referencia en este segmento y, aunque se está convirtiendo en un peso pesado, sabe gestionar ese incremento de peso y sigue ofreciendo unas prestaciones y un comportamiento dignos de mención.

No es barato, eso sí. Está disponible desde 111.200 euros (2.000 euros más en el caso del M4 Competition Coupé) y, es cierto que ahora tienes muchas más opciones de color y adornos. Ninguno de ellos lo suficientemente llamativo como para que su desproporcionada parrilla pase desapercibida. Pero si te soy sincero, además de que este es un 'problema' muy subjetivo y que es cuestión de gustos, lo paso totalmente por alto por lo redondo que es este modelo.

Nuestro veredicto

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