Prueba del Renault Scenic E-Tech: un eléctrico familiar de verdad

Prueba del Renault Scenic E-Tech

Probamos el nuevo Renault Scenic E-Tech 2024, la reinvención del coche familiar que llegó como monovolumen en 1996. Siendo ahora un SUV 100% eléctrico, ¿sigue siendo una buena alternativa para una familia o es un modelo del montón?

Sí, has leído bien. Esta es la prueba del Renault Scenic E-Tech y, aunque este coche no se parezca al monovolumen de Renault que conoces, se trata de su última evolución. Como comprobarás, ahora es más bien un SUV y además es un modelo 100% eléctrico. Sin duda, han cambiado mucho las cosas desde la primera generación, llegada en 1996.

Lo que no ha cambiado, eso sí, es el enfoque de este modelo. El Renault Scenic original estaba pensado para las familias y por ello se trataba de un coche espacioso y práctico. Esto es lo que también busca ofrecer este nuevo modelo, pero con un enfoque mucho más moderno.

Sin duda, esa modernidad salta a la vista, ya que este es un coche que llama la atención desde un primer momento. A pesar de ser un coche eléctrico y de estar obligado por ello a tener una carrocería aerodinámica -su Cx es de 0,30- y con superficies suaves, presenta una apariencia musculosa y robusta. Comparado con otros coches por la carretera, casi parece que sigue siendo un concept.

Esto no es extraño, ya que el diseño del Scenic E-Tech 2024 no dista demasiado del que tenía el prototipo Scenic Vision que conocimos en 2022. En general, sigue el nuevo lenguaje de diseño de la firma gala, pero con un estilo propio. Además del aspecto musculoso general, destaca la firma lumínica LED y elementos como las llantas aerodinámicas de hasta 20 pulgadas.

Por otro lado, otro elemento que no pasa por alto en el nuevo SUV eléctrico de Renault está en sus dimensiones. Mide 4.470 mm de largo, 1.864 mm de ancho y 1.571 mm de alto. No es un coche pequeño y, con una batalla de 2.785 mm, su habitáculo tampoco se queda corto en lo que se refiere a la amplitud.

Dentro, espacio y algunas sorpresas

Sentado en las plazas delanteras o en las traseras, no te vas a sentir agobiado. Además, el acceso a estas últimas ofrece suficiente anchura y la postura es cómoda, aunque se agradecería algo más de espacio para colocar los pies bajo el asiento delantero. No obstante, no es una gran molestia y solo lo notarás si eres alto.

Así, el interior del nuevo Renault Scenic 2024 cumple con el espacio que se espera de un coche familiar, pero también cuenta con otras virtudes. Por ejemplo, hasta el 26% de los materiales usados aquí son reciclados, pero tienen un buen tacto y los ajustes tampoco dejan que desear. Mi única pega sería el uso de plásticos duros mejorables en zonas como los aireadores traseros, eso sí.

Por otra parte, la tecnología está muy presente, como es de esperar en un coche nuevo. El cuadro de instrumentos es digital y mide 12,3 pulgadas, mientras que la pantalla central es de 12. Con esta última puedes manejar el sistema OpenR Link con Google integrado, detalle que hace que el uso sea muy cómodo. Además, vienen incluidas aplicaciones como el navegador Waze, otro punto positivo.

En general, el uso del sistema es intuitivo y adecuado. Además, me gusta el diseño de la interfaz, con la información presentada de forma clara y atractiva gracias a una paleta de colores que varía en función del modo de conducción escogido. Aun así, debo reconocer que el funcionamiento podría ser más fluido en ocasiones.

Más allá de esto, podría parecer que ya no hay nada más que merezca la pena destacar en la tecnología del interior, pero no es así. Como muchos modelos actuales, el nuevo Scenic tiene un techo panorámico, pero no una cortinilla para taparlo. En su lugar, se opaca con tecnología de cristal líquido por secciones mediante un botón. Curioso, ¿verdad?

Este sistema es el que define a este techo desarrollado junto a Saint-Gobain y denominado Solarbay. Cuesta 1.500 euros adicionales y es cierto que permite impedir la entrada de los rayos de sol, pero no de la luz. Puede no ser un elemento necesario, pero sí es curioso, aunque no me convence el hecho de que nunca se llegue a ver 100% transparente, quedando con un cierto filtro blanco.

Finalmente, el otro detalle curioso de este habitáculo se sitúa en las plazas traseras, donde un voluminoso reposabrazos central cumple varias funciones. Lo puedes abrir y guardar algún objeto en su interior, así como tiene entradas USB y posavasos. Además, cuenta con soportes giratorios para móvil o tablet, para que tu hijo se entretenga mientras vais de viaje. Bien pensado.

Prueba del Renault Scenic E-Tech

Hasta 620 km de autonomía con 220 CV

Sí, sé que he hablado de hacer un viaje y que este es un coche eléctrico, pero lo cierto es que sus capacidades sobre el papel permiten pensar en esta posibilidad. De entrada, la autonomía del Renault Scenic E-Tech es de 420 kilómetros para la versión de acceso de 170 CV. Además, hay otra alternativa que va más allá.

La variante más capaz rinde 220 CV y 300 Nm de par, así como monta una batería de 87 kWh que le permite firmar 620 kilómetros de autonomía. Esta es la versión que me acompaña hoy y, a priori, presenta unas cifras realmente interesantes.

¿Cómo va?

Prueba del Renault Scenic E-Tech

Para comprobar si realmente es tan interesante como parece, me dispongo a probar el Renault Scenic E-Tech por una ruta que combina recorrido urbano y varias carreteras. No será un viaje extenso, ya que este es un primer contacto, pero me servirá para llevarme unas primeras sensaciones al volante.

De entrada, lo primero que me llama la atención es el tacto de los pedales, más cercano al que ofrece un coche de combustión. Esto permite que la conducción sea más suave al poder modular la aceleración de forma más gradual, algo que no sucedía en los eléctricos de hace no tanto tiempo. 

Junto a esto, la dirección es suave y, aunque podría ser más comunicativa, no peca de ser demasiado blanda. Asimismo, no hay que pelearse mucho con ella en calles más estrechas o reviradas, ya que el radio de giro de 10,9 metros de este modelo ayuda a que la conducción por ciudad sea bastante cómoda, a pesar de no ser un coche pequeño.

Así, en ciudad no hay puntos negativos destacables, pero hay eléctricos que no destacan tanto en carretera. Más allá del inevitable incremento del gasto de energía y la consecuente pérdida de autonomía, el ruido del viento o la rodadura suele hacerse notar más de lo deseado. Ahora bien, eso no sucede aquí, ya que la insonorización es realmente buena.

Prueba del Renault Scenic E-Tech

A bordo del Renault Scenic eléctrico, el silencio es casi sepulcral y en eso influyen detalles como una espuma que se encuentra entre la batería y el habitáculo para reducir el sonido en el interior. Sin duda, el objetivo se ha conseguido y esto ayuda a que la comodidad a bordo sea muy elevada, también gracias a una suspensión que filtra bien los baches del terreno.

Además de esto, la suspensión también ofrece un punto de firmeza que ayuda a mantener el coche estable, de manera que sientes una sensación de aplomo general constante incluso en zonas de curvas. A esto se suma una mecánica de 220 CV que, aunque no tiene una patada brutal, empuja realmente bien en incorporaciones y adelantamientos, sobre todo en el modo deportivo.

Con todo, se podría decir que este SUV eléctrico se mueve bien, pero también se acompaña de unos frenos que ofrecen la eficacia que se espera para un coche de unos 1.800 kg de peso. Además, en ciudad apenas tendrás que pisar el pedal, gracias a los niveles de retención disponibles.

En total, Renault ofrece cuatro niveles que puedes manejar desde las levas situadas tras el volante. El modo menos restrictivo hace que no notes nada y eso te permite ir por autopista sin dar tirones al levantar el pie, así como el más fuerte hace que apenas tengas que usar el freno en ciudad.

Esto también es algo que te ayudará a maximizar la autonomía, algo especialmente importante en un coche que busca poder hacer ciertos viajes largos. Si es realmente capaz o no, es algo que habrá que comprobar cuando sea posible hacer una prueba más extensa, pero este primer contacto deja entrever que sus cifras oficiales no están lejos de la realidad.

Durante mi prueba del Scenic E-Tech, con distintos tipos de vías y cambios de ritmo variados, el consumo ha sido de unos 17 kWh/100 km y el homologado es de 16,8 kWh/100 km. Así, no parece descabellado poder recorrer unos 600 kilómetros a bordo, aunque eso habrá que comprobarlo más adelante. Aun así, las primeras sensaciones han sido realmente positivas.

Prueba del Renault Scenic E-Tech

Precio y rivales del Scenic E-Tech

En este momento, el precio del Scenic E-Tech 2024 arranca en 38.703 euros para el acabado Evolution de acceso, aunque esta versión se asocia a la mecánica de 170 CV y 420 km de autonomía. Si quieres contar con la variante de 220 CV, deberás optar por el acabado Techno, ya disponible con esta mecánica por 45.993 euros.

Así, entre sus rivales podemos encontrar varios. Por ejemplo, el Kia e-Niro se ofrece por 38.599 en la versión de 204 CV y 460 km de autonomía. Además, el Hyundai Kona EV parte de 28.240 euros en la versión de 156 CV y 377 km de autonomía o de 32.640 euros en la variante de 204 CV y 484 km de autonomía. 

Nuestro veredicto

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Etiquetas: Motor