Un camión que funciona con amoníaco: ¿otra opción de transporte sostenible?

Camión de amoníaco de Amogy

Una compañía ha pensado en camiones que funcionan con amoníaco como una alternativa sostenible para el transporte.

La descarbonización del transporte se está tratando de llevar a cabo con numerosas fórmulas, como los motores eléctricos o el uso del hidrógeno. Sin embargo, hay una empresa que ha pensado en otra opción: un camión que funciona con amoníaco.

La compañía estadounidense Amogy es la que ha presentado esta idea, mediante un camión de 402 CV que funciona con amoníaco. Según señalan, este modelo es cinco veces más eficiente que los modelos eléctricos, como puede ser el Tesla Semi. Además, también presumen de contar con tres veces más eficiencia que aquellos que utilizan pila de combustible de hidrógeno.

Tal y como han apuntado sus creadores, el camión de amoníaco de Amogy es capaz de almacenar hasta 900 kWh, los cuales se reparten en tres depósitos. Estos se pueden recargar en menos de ocho minutos, lo que supone un gran avance frente a camiones como los eléctricos, los cuales cuentan con el mismo inconveniente de los coches eléctricos: los tiempos de carga.

Ahora bien, ¿es fiable esta tecnología? Aún está en desarrollo, pero el prototipo probado en el campus de la Universidad de Stony Brook, en Nueva York, ha arrojado buenos resultados. Eso sí, ahora habrá que realizar otro test en condiciones reales antes de poder afirmar si esta puede ser una solución factible en un futuro próximo.

Te interesa: La solución definitiva al transporte y producción del hidrógeno

Sea como fuere, está claro que en Amogy están enfocados en el amoníaco, ya que llevan desde 2021 trabajando con él. En julio de aquel año lo utilizaron en un dron de 5 kW y el pasado año trasladaron esta idea a un tractor John Deere de 100 kW. Ahora, se han pasado al camión y queda por saber cómo se desarrolla la idea.

Asimismo, también hay que conocer datos concretos que no se han facilitado aún, como las emisiones que se producen. Al fin y al cabo, el amoníaco genera emisiones de óxido de nitrógeno, por lo que habrá que ver cómo resulta el proyecto. Aun así, no deja de ser una idea interesante y otra muestra más del ingenio que está surgiendo por la descarbonización.