Elige tú el adjetivo: Nissan Leaf híbrido enchufable con motor de una Kawasaki Ninja ZX-10R

Nissan Leaf con motor Kawasaki Ninja

Gustavo López Sirvent

En su modo híbrido combinado desarrolla 284 CV

El lenguaje español, idolatrado para unos y denostado para otros, contempla múltiples acepciones para describir lo que te vamos a narrar. Podría ser excéntrico, estrafalario, singular o peculiar o loco, pero preferimos que le pongas tú el epíteto que creas. Así es el Nissan Leaf que el  youtuber SuperfastMatt ha decidido transformar equipándolo con el motor de una Kawasaki Ninja ZX-10R.

No sabemos si podrías llegar a sentir un flechazo, pero si te fijas en el video que verás en este artículo, a lo mejor, te remueve algo por tu interior (o no...). 

El ideólogo de este proyecto se llama Derek Young y es un ingeniero mecánico de Estados Unidos. Se topó con que la batería de su Nissan Leaf MKI estaba en muy mal estado y, en lugar de comprar una nueva o incluso deshacerse del coche, optó por dar rienda suelta a su imaginación para crear el Moto Leaf híbrido enchufable.

Su batería apenas podía recorrer 40 kilómetros, pero no quería perder la seña de identidad de este coche, que no es otra que su propulsor eléctrico. A este buen hombre se le ocurrió asociar el eléctrico con un motor gasolina para crear así un híbrido enchufable. 

La parte más importante de este ¿engendro? estaba en en el espacio disponible del utilitario japonés. Al youtuber se le encendió una luz y pensó que el motor de una moto como la Kawasaki Ninja ZX-10R podría servirle para que cuajase su idea (a pesar de que la compró de segunda mano y con un accidente a cuestas).

Una cosa sí tenía clara Young. El bloque eléctrico iba a permanecer inalterable, por lo que la única opción material para incorporar el motor de gasolina era la del maletero. Se puso manos a la obra y añadió a su proyecto el subchasis trasero de un Lexus IS350. Además, se vio obligado a adaptar el eje trasero del Nissan Leaf para instalar el motor de 998cc con 175 CV y 13.500 rpm. 

Esta posición también obligó a introducir cambios en la parte posterior del habitáculo, pues el nuevo motor gasolina necesitaba aire fresco para respirar y refrigerarse, lo que terminó materializándose en la instalación de una enorme toma de aire en la ventana trasera derecha.

Mejoras en suspensiones, neumáticos y caja de cambios

El ingeniero estadounidense quería más. No se conformaba con lo ya conseguido, por lo que también mejoró sus suspensiones del Moto Leaf, agregó pinzas de freno delanteras de un Nissan 370Z, llantas Enkei con neumáticos deportivos Nexen e introdujo un selector manual para gestionar la transmisión secuencial que estaba ligada al motor de la Kawasaki. 

Una vez acabada dicha barbaridad en cuanto a técnica, mecánica e ingeniería, este vehículo tiene diferentes potencias: en modo eléctrico (109 CV), en modo híbrido combinando ambos ejes de tracción con 284 CV; o en modo de combustión interna con 175 CV.

Etiquetas: Coches raros