De compacto a compacto: Opel Astra contra Ford Focus

Compres el que compres, acertarás...

Texto: Ollie Kew

¿Qué estoy mirando? 

Topgear.es, la mejor web de motor que existe en español -fin del contenido patrocinado-. Ahora en serio, se trata del nuevo Opel Astra -aunque en las imágenes veas un logotipo distinto que pertenece a Vauxhall, el sello bajo el que comercializa Opel sus coches en Reino Unido- que se enfrenta al veterano Ford Focus en una comparativa exprés con dos de los mejores compactos que puedes encontrar ahora mismo en el mercado. 

¿Son modelos nuevos? 

Sí y no, literalmente. El Opel Astra ha aparecido recientemente en el mercado y se trata de una renovación de uno de los modelos estandartes de la firma alemana y con más historia, pues su honorable nombre -bautizado originalmente como Kadett- lleva 80 años dando vueltas por el mundo. Para esta nueva generación en Opel han querido darle una vuelta al coche en general y lo han hecho actualizando su diseño -que en realidad no es demasiado rompedor con respecto a su modelo predecesor-, cargándolo de más tecnología y haciéndole adelgazar... entre 130 y 200 kg en función de la combinación mecánica y el nivel de acabado. Sí, nosotros también nos quedamos flipados cuando nos enteramos. 

El Ford Focus, por su parte, no es un modelo precisamente nuevo, pero sigue siendo una de las principales opciones para cualquier comprador que busca un vehículo compacto y valora la relación calidad/precio. De eso en Ford saben mucho. Y de hacer buenos coches, también -¿te suena el nuevo Ford Focus RS?-. 

Muy bien, ¿qué tal son sus interiores?

El Ford Focus actual es un modelo que salió al mercado en el año 2010 -aunque recientemente haya recibido un lavado de cara-, y eso se nota en sus interiores: su calidad no es mala y la postura al volante tiene un compromiso más que razonable entre la comodidad necesaria para no morir de un ataque de ciática en medio de un atasco y la suficiente sujeción como para no terminar dando volteretas por el habitáculo cuando afrontas una carretera sabrosa

El Opel Astra, en cambio, goza de un interior mucho más moderno y con una calidad más aparente, fruto de la evolución lógica de las cosas a lo largo de los casi seis años que separan el lanzamiento de un modelo y el otro. Sólo hemos encontrado una pega en el coche de la marca del rayo: el accesorio para dejar el teléfono móvil sujeto al salpicadero. En serio, hemos visto artefactos semejantes en eBay con unas calidades mejores... al precio de 6 euros. 

¿Y de tecnología?

Nuevamente el tiempo no pasa en balde y el Focus vuelve a acusar su mayor edad... tiene un sistema de navegación correcto pero no es tan rápido como el del Astra y su pantalla no se acerca ni por asomo a la del modelo alemán: ésta es mucho más sensible y rápida a las órdenes del usuario. Además el germano cuenta con WiFi 4G a bordo y el sistema OnStar, que te permite tener un asistente 24 horas al día para conocer el estado de tu coche o preguntar una dirección -sí, como Siri pero de carne y hueso... y menos vacilón-, e incluso enviar una señal de socorro automática al sufrir un accidente o una avería en carretera. Lo hemos probado a fondo y mola. Mola mucho. 

Eso es muy bonito, ¿qué tal van?

¿Quieres coches juguetones? Toma esta comparativa: Peugeot 208 GTi by Peugeot Sport contra Ford Fiesta ST200. 

Al fin, llegamos a un terreno en el que el Ford Focus sigue teniendo algo que decir a pesar de su veteranía: el chasis del modelo del óvalo sigue resultando sobresaliente gracias a una puesta a punto soberbia -como suelen tener todos los modelos de la marca-, lo que lo convierte en un coche cómodo, juguetón cuando lo deseas y sobre todo muy seguro. Un 10 para él. 

El Opel Astra, en cambio -o en embargo, como dice mi cuñado- no logra alcanzar el nivel dinámico del Focus, pero también es espectacularmente ágil: se le nota la dieta milagro a la que ha sido sometido y tiene un comportamiento muy bueno. Los niveles de estabilidad que están alcanzando los vehículos actuales pronto nos permitirán poder retirar carnets a los conductores inoperantes: si consigues accidentarlos por tu cuenta, tal vez no debieras ni cruzar la calle sin ayuda. 

Pues dame un veredicto...

Creo que ha ido quedando claro a lo largo de toda la comparativa, pero como resumen podríamos decir que si lo que quieres es un coche con la última tecnología que te ofrezca una vida a bordo entretenida, deberías optar por el Opel Astra. Si lo que prefieres es un coche que de verdad se porte bien enlazando curvas a lo loco y con el que probablemente consigas un buen descuento, el Ford Focus es el tuyo. 

Te doy precios por encima de ambos modelos: el Opel Astra puede ser tuyo por un precio base de 18.850 si eliges la versión Expression con el motor 1.0 de gasolina y 105 CV -que puede llegar a los 25.650 si optas por la versión más equipada Excellence con motor diésel de 136 CV y caja automática-; el Ford Focus, por su parte, puede irse contigo a casa por 18.825 euros en su acabado Trend con motor gasolina EcoBoost 1.0 de 100 CV -su precio límite puede ser tan alto como lo sean tus sueños... podrías elegir las versiones ST o RS-. 

En ambos casos, las marcas suelen ofrecer jugosos descuentos que siguen dejando los precios muy parejos así que, aunque sea un cierre para una comparativa más manido que la palanca de cambios de un taxista, tenemos que decirlo: compres el que compres, vas a acertar.