Los nuevos coches de la Policía Nacional se han pasado a la tecnología híbrida, y es que desde ya han repartido 70 unidades del Toyota Prius+ por algunas provincias españolas.

Estos coches nuevos cuentan con equipamiento específico, como es el kit de detenidos (no nos han contado en qué consiste, pero el nombre tiene su cosa), aparte de la rotulación habitual, así como el puente de luces, que son led. Y de los 70, 10 de los Prius+ son 'inteligentes' porque cuentan con  navegador, sistema de lectura y consulta automática de documentos, así como cámara de videovigilancia de detenidos y sistema de reconocimiento de placas de matrícula OCR.

Últimamente parece que los Cuerpos de Seguridad del Estado se están pasando a las tecnologías 'limpias': por ejemplo, el Ayuntamiento de Madrid utilizará Mitsubishi Oulander PHEV, mientras que en Valladolid ya tienen unos cuanto Renault Zoe.

¿Aún buscas el mejor coche híbrido?

Esta última hornada de coches de la Policía Nacional cuentan con la tecnología híbrida normal de los Prius+, lo que significa que utilizan un motor 1.8 de gasolina atmosférico que se beneficia de la ayuda de un propulsor híbrido para conseguir 140 CV. La autonomía en modo eléctrico en este coche es, como en el caso del Toyota Prius, prácticamente inexistente: en circunstancias totalmente óptimas podrían hacer como dos kilómetros en modo eléctrico.

Sin embargo, de lo que se trata es de que los dos motores se complementen para reducir el consumo y las emisiones (que en el mejor de los casos son de 130 gramos de CO2/km), mientras que las baterías se van regenerando con la frenada, las deceleraciones y le carga directa del propio motor térmico.

¿Y qué se van a encontrar los policías al volante del Toyota Prius+? Un coche espacioso, cómodo, con unos asientos que, si no se los han cambiado, tienen un mullido tirando a firme y cómodos para pasar mucho tiempo en ellos. También podrán disfrutar de una buena ergonomía, con mandos colocados en lugares lógicos y, sobre todo, una buena visibilidad circular para maniobrar por calles estrechas repletas de esas trampas casi invisibles que son bolardos.

En cuanto a la dinámica... Digamos que no serán los mejores coches para perseguir a los malos al estilo de Alerta Cobra, pero al menos podrán ir rápido con bastante confort. Eso sí: como en todos los Toyota híbridos, el CVT se empeñará en arruinar la calidad de conducción debido al sistema CVT, que revoluciona demasiado el motor cuando necesita ganar velocidad, por lo que se dejará notar demasiado el ruido y las vibraciones.

Los coches de la Policía, siempre polémicos

De todos, modos, los coches de la Policía suelen ser objeto de polémica. En ocasiones algunos se quejan de que son muy caros y que, claro, van a tener que poner más multas para pagarlos. Es el caso de, por ejemplo, los ya famosos Mercedes Clase C con cinemómetro o del Renault Mégane RS de la Policía Municipal de Madrid.

Otras veces te hacen levantar una ceja: hace un año nos contaban que Leganes, una ciudad de Madrid, tendría Bultaco Brinco para ciertas labores. Y en Valladolid, por ejemplo, utilizan Renault Zoe, mucho más eficientes a la hora de machacar las calles durante horas y horas... pero que no servirían para una persecución a alta velocidad durante demasiado tiempo.

Esto me hace recordar una anécdota que viví hace unos cuantos años en Vermont, que es un estado al norte de Estados Unidos, justo encima de Nueva York. Me acerqué babeando a (ad)mirar un Ford Crown Victoria debidamente rotulado con las letras doradas de Sheriff. En ese momento salió el agente de una tienda con un café bien humeante en la mano (y probablemente venía de rodar una película, porque era lo más típico-tópico que te puedes echar a la cara). Se acercó y me preguntó que si me gustaba. Me contó que llevaba un V8 y que se ponía a 150 millas por hora (240 km/h) y que aprovechaba las defensas delanteras para sacar a los malos de la autopista.

A continuación me preguntó por los coches de Policía de mi ciudad. Jamás olvidaré la 'cara de WTF' cuando le dije que la Policía Nacional en aquellos tiempos tenían Citroën Xsara Picasso y Renault Scénic... y que eran diésel. Me preguntó que cómo demonios hacían para alcanzar a los malos. Sin duda, otro mundo.