Toyota modifica el motor del GR Yaris para que funcione con hidrógeno

Toyota GR Yaris

¿Y si los motores térmicos pudieran sobrevivir?

Cuando se trata del automovilismo, la innovación siempre permite ir más allá. Con el objetivo de probar sus motores de hidrógeno, Toyota ha cogido un GR Yaris y ha modificado su motor para que funcione con esta propulsión, algo que quieren utilizar en carreras de resistencia. ¿Quién dijo que la sostenibilidad estaba reñida a las prestaciones?

En esencia, se trata del motor tradicional de tres cilindros y 1,6 litros del GR Yaris, pero alimentado por hidrógeno en lugar de gasolina. Esto es algo distinto al sistema de otros modelos como el Mirai, que utilizan el hidrógeno en una pila de combustible para alimentar un motor eléctrico. De esta forma, la compañía no se limita a los motores eléctricos y explora nuevas fórmulas sostenibles que permitan lograr buenas prestaciones. 

El bloque resultado de este experimento será montado en un coche de competición basado en el Toyota Corolla Sport. Dicho modelo participará en el campeonato de resistencia Super Taikyu japonés, que dará comienzo el próximo 21 de mayo. Será entonces cuando podamos comprobar las verdaderas capacidades de este motor, aunque hay buenas expectativas al respecto.

Según los ingenieros de Toyota, la combustión en un bloque de hidrógeno es más rápida que en uno de gasolina, por lo que debería tener una respuesta más inmediata. Además, a nivel de emisiones, los motores de hidrógeno emiten óxidos de nitrógeno (NOx) pero no emiten CO2.

No solo para competición

Sin duda, esta es una propuesta interesante, pero Toyota planea llevarla más allá de la competición y traerla a algún modelo de calle. Según detalla la marca en un comunicado: “Si bien tienen un excelente desempeño ambiental, los motores de hidrógeno también tienen el potencial de transmitir la diversión de conducir, incluso a través de sonidos y vibraciones”.

Aún habrá que esperar para conocer más detalles al respecto, pero esto podría ‘salvar’ a los motores térmicos. Y es que su desaparición parecía inminente ante el rápido crecimiento de las mecánicas eléctricas, pero propuestas como esta o el nuevo combustible sintético de Porsche podrían lograr que tengamos más tiempo para disfrutar de estos motores.