La prueba del BMW Serie 1 2019 me tiene en ascuas: la marca lo ha cambiado lo suficiente como para considerarse un concepto completamente nuevo. La principal novedad es el paso de la tracción trasera a la tracción delantera, así como el adiós a los motores de seis cilindros, al menos de momento. ¿Pierde parte de su gracia? Hombre, sobre el papel, sí: tracción delantera y motores de tres y cuatro cilindros, como cualquier otro compacto.

Ahora bien, eso no significa que el BMW Serie 1 no sea un gran coche, vayamos por partes. En BMW han pensado que no tiene sentido andarse por factores pasionales para desarrollar un coche y lo han querido mejorar usando la cabeza y no el corazón. Solo uno de cada 20 coches contaban con motor de seis cilindros y la mayoría de la gente le da igual que sea tracción delantera o trasera. 

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Fotos: prueba del BMW Serie 1 2019 (15 imágenes)

En cambio, la gente sí se fija mucho en el espacio para las plazas traseras o el maletero, que en ambos casos mejora notablemente. Ese es el punto, la racionalidad en pro de los ideales. Muchos pueden criticarlo, pero nadie puede criticar la intención de una marca de coches por vender más coches. ¿No?

Estéticamente las proporciones cambian bastante. Por delante se ve bastante agresivo, aunque es la vista lateral la que quizás más cambia de concepto. Se ve más alto y menos compacto, menos deportivo. Lo mismo ocurre con la zaga, mucho más alta y pensando en la practicidad y no en el diseño o en el empaque. 

Bajo el capó, las versiones de acceso cuentan con sendos tres cilindros, tanto gasolina como diésel, aunque a partir de los 118 ya utilizan propulsores de cuatro cilindros, mientras que el 120d y el 135i utiliza tracción integral, por lo que puedes despedirte de cualquier problema de subviraje. ¿No hay electricidad de por medio? En un futuro cercano seguro que llegan versiones para incorporar a este compacto al selecto club de los mejores coches híbridos.

El nuevo BMW Serie 1 de esta prueba comparte plataforma con el X1 y el X2, con el BMW Serie 2 Active Tourer, el Mini Clubman o el Countryman. Pero la puesta a punto es diferente: el chasis, asociado a un control de tracción inteligente, permite que el comportamiento dinámico sea más emocionante. Cuenta también con suspensión trasera multi-lunk en todas las versiones, incluso en las de acceso a la gama.

La gente que no puede tragar a la tracción delantera debería probar un Golf GTI o un Seat León Cupra. Simplemente deben aceptar que el mundo está cambiando. O esperar a la llegada del futuro BMW Serie 2 Coupé, que mantendrá la tracción trasera y una versión M con seis cilindros. 

Prueba BMW Serie 1 2019: comportamiento

Empiezo con la versión más vendida, el BMW 118d 2019. Cumple con la más moderna normativa de homologación por lo que es un diésel tremendamente limpio y eficiente. ¿Más limpio un diésel que un eléctrico? Eso da para otra discusión. Este motor es fantástico: cuenta con doble turbo y suficiente fuerza para un diésel de su potencia. Se asocia a la perfección con el cambio automático de ocho velocidades para conseguir refinamiento y consumos bajos.

Ahora bien, la pregunta del millón: ¿se comporta como un auténtico BMW o como la anterior generación con tracción trasera? Creo que la palabra clave aquí es el equilibrio. El sobreviraje o el contravolanteo son conceptos que han quedado desterrados del Serie 1. El conjunto se mueve de una manera muy agradable y la dirección responde de una manera muy progresiva.

¿Problemas de tracción? Para nada: el BMW 118d 2019 se comporta muy bien y no hay rastro de subviraje. Es preciso y se nota que está muy bien fabricado. Todo está donde debe y salvo los más tiquismiquis, la tracción trasera no se echa de menos. Si es eso lo que querías saber.

Ahora bien, lo hemos probado con la amortiguación adaptativa y debo decir que el modo Sport no transforma dramáticamente el conjunto en una máquina adictiva a las curvas. Es un coche en el que la palabra definitiva es equilibrio. Quizás no destaca en nada, pero siempre se comporta de una manera noble y refinada.

Prueba BMW Serie 1 2019: interior

No hay duda, el interior del BMW Serie 1 2019 ha dado un gran salto, sobretodo en lo que a habitabilidad se refiere. El cambio de configuración permite un interior más desahogado en todas las cotas, además, gracias a una calidad de fabricación muy alta, siempre te sientes a gusto.

Quizás, eso sí, sea demasiado conservador en algunos aspectos, como el diseño. No hay guiños al estilo, ni en forma de detalles coloridos o con formas geométricas de algún elemento de la tapicería o del diseño del salpicadero. Es más bien soso, pero con una calidad muy alta y con una eficacia en todos sus sistemas que funciona.

¿Por qué digo esto? Porque muchos dirán que está a años luz del interior del Mercedes Clase A con su espectacular sistema MBUX con doble pantalla flotante, y probablemente tendrán razón, a nivel estético, pero a nivel funcional, este BMW es súper intuitivo y todo está en su lugar. Mención aparte merece el fabuloso sistema de 'head-up display', que proyecta cantidad de datos en el parabrisas.

Por supuesto, cuenta con lo más de lo más en cuanto a equipamiento tecnológico de seguridad y de conectividad. Digamos que se ha vuelto un coche más racional, un vehículo para viajar, con mucha calidad y tecnología, pero quizás algo menos pasional que su antecesor. Que no te extrañe esto: caminamos día tras día hacia un mundo más lógico, hasta el día que las propias máquinas nos quiten el placer de conducir.

BMW Serie 1 2019: estos son los precios

Los precios del BMW Serie 1 2019 en España parten en los 28.800 euros de la versión de acceso, el BMW 116i con un tres cilindros de 140 CV. Sin embargo, creo que la versión diésel que he probado es muy interesante: el BMW 118d 2019 cuesta 31.050 euros y a cambio te llevas 150 CV y un consumo muy ajustado, de 4,5 l/100 km.

Por supuesto, como en cualquier marca premium, el precio del equipamiento opcional puede incrementar notablemente la factura, pero no me parece un mal precio de entrada: resulta 3.550 euros más barato que el Mercedes A200d con un motor de la misma potencia, una diferencia de precio difícilmente asumible teniendo en cuenta lo que ofrecen uno y otro, aunque eso sí, el Mercedes es más 'cool' estéticamente.

Los acabados son Serie, Advantage, Sport y M Sport y desde el primero nivel el nuevo Serie 1 trae de fábrica faros LED (incluido antiniebla, llamada de emergencia inteligente, BMW Live Cockpit con asistente personal, sensor de lluvia, garantía de tres años o 200.000 kilómetros, llantas de aleación, servotronic, volante de cuero multifunción, indicación de presión de neumáticos y climatizador automático: Estos son los precios:

• BMW 118i 140 CV: 28.800 euros
• BMW M135i XDrive: 51.700 euros
• BMW 116d 116 CV: 29.150 euros
• BMW 118d 150 CV: 31.050 euros
• BMW 120d xDrive: 40.800 euros

Prueba BMW Serie 1 2019: conclusión

En resumen: el nuevo BMW Serie 1 de esta prueba ha cumplido con lo que se espera de un coche de su nivel. El cambio de tracción trasera a delantera no supone una merma importante en sus capacidades dinámicas, imperceptibles para el 99% de los potenciales compradores. Sólo los más románticos echarán de menos la tracción trasera y lo único que mejoraría es que el tacto de la suspensión es un punto seco.

Además, gracias a este cambio consigue un interior mucho más aprovechable y útil, especialmente en las plazas traseras y en una maniobra de entrada y salida mucho más cómoda. El BMW Serie 1 es un coche muy equilibrado y un aliado para quienes busquen un coche compacto de calidad y a la última tecnológicamente.