En más de 100 años de historia, Renault ha hecho de todo. Literalmente. Desde coches familiares exitosos hasta haber ganado mundiales de Fórmula 1 con Benetton, Williams y el propio equipo francés junto a Fernando Alonso.

Pero volviendo al tema, los prototipos son una parte esencial de las marcas. Definen rumbos, ponen metas y la opinión del mundo que los contempla ayudan a decidir muchos aspectos que pueden suponer el ascenso o declive de una compañía.

El prototipo con motor de F1 que no triunfó, pero que al menos fue espectacular

No triunfó porque era un despropósito de coche y solo se hicieron dos ejemplares, pero se trata de la madre de todos los swap de motor. Su carrocería es la de un Renault Espace de cinco puertas, pero el motor es el RS5 V10 que equipó el Williams FW15C de Fórmula 1.

Un V10 complejo, de 3,5 litros y 40 válvulas con una caja de cambios semiautomática de seis velocidades mediante levas en el volante. Su chasis está formado de fibra de carbono y aluminio, al igual que gran parte de la carrocería, y cuenta con refuerzos interiores y cuatro asientos baquet.

Fue capaz de pasar de 0 a 200 km/h en 6,9 segundos y alcanzar una velocidad máxima en circuito de 300 km/h. Genial, sí, pero seguramente es el coche menos práctico del mundo. Como anécdota, ha pasado a la historia, pero a nivel de rentabilidad... Solo con el prototipo debió ser un ingente gasto de dinero allá por 1994.

Renault Scénic de 1991: el nacimiento de un gran familiar

Este prototipo es uno de esos que nacen repleto de tecnologías geniales pero con una estética para dar de comer a parte. Pero para eso están estos concept, claro. Su diseño era futurista, pero quizá con demasiado cristal y una forma similar a un Fiat Multipla hinchado.

Contó con tecnologías geniales como detector de fatiga (algo que será obligatorio en todos los coches a partir de 2022), bloqueo automático de puertas o cámaras en vez de retrovisores.

Luego, algunas de esas tecnologías desaparecieron (como su estética) con el lanzamiento final del Renault Scénic en 1996, que fue evolucionando poco a poco con versiones todoterreno, más potentes y modernas. La generación actual data de 2016 en versión monovolumen de cinco y siete plazas.

Renault Sport R.S 01 DE 2014, heredero del Dezir

El concept que se presentó en el Salón del Automóvil de Moscú en 2014 dejó al mundo asombrado. Se basó en el concept anterior del Renault Dezir de 2010, pero enfocado en una especificación GTE/GT3.

Está propulsado por un motor central trasero V6 de 3,8 litros biturbo Nismo, como el de la generación R35 del Nissan GT-R y modificado para montar un cárter seco. Además, fue desarrollado con la ayuda de Alain Prost, el tetracampeón del mundo de Fórmula 1.

Su peso total es de 1.100 kg con una potencia que sobrepasa los 500 CV y 600 Nm de par máximo, además de cumplir la normativa FIA LMP1 de 2014. 

Entre otras características técnicas, cuenta con una caja de cambios secuencial de 7 velocidades Sadev, discos de freno en carbono con pinzas de 6 pistones y una cuidada aerodinámica que lleva el flujo de aire hacia arriba y al alerón trasero con endplates, lo que genera una buena carga en pista.

Aunque desgraciadamente podía haber sido el Audi R8 francés, nunca salió de los circuitos y de campeonatos como el GT Trophy de Francia, pero no habría que cerrarle la puerta en un futuro electrificado...