El Suzuki Across ha sorprendido al mercado por su calidad, tecnología y autonomía eléctrica. Un SUV híbrido que, por otra parte, de Suzuki tiene más bien poco. Se trata de un gemelo del Toyota RAV-4 PHEV, uno de los SUV híbridos enchufables de referencia por su tecnología eléctrica y gran autonomía. Toyota y Suzuki colaboran estrechamente para mejorar su competitividad y esta unión de caminos es un buen ejemplo.

Pero a lo largo de la historia ha habido otras colaboraciones entre marcas para crear coches gemelos con distinto logo. Es algo que probablemente irá a más con el objetivo principal de reducir costes. A continuación te dejo otras colaboraciones clónicas como la del Suzuki Across y el Toyota RAV-4 para que veas que es algo relativamente normal.

Mitsubishi L200 y Fiat Fullback Cross

Este tipo de uniones entre marcas suele ser más popular en segmentos del mercado con no demasiada popularidad, como por ejemplo las pick-up, los utilitarios o las grandes furgonetas de reparto. Bien, empiezo por los primeros: Mitsubishi decidió que para aumentar las ventas en Europa de su L200, una asociación con Fiat podía ser buena idea. El realidad lo es: su diseño es más atractivo y cuenta con accesorios Mopar para personalizarla a tu gusto.

Volkswagen Up, Seat Mii y Skoda Citigo

Los coches urbanos suelen protagonizar bastantes uniones entre marcas para el desarrollo común de un mismo coche bajo diferentes marcas. En este caso hablamos de tres marcas de un mismo grupo: algo que entra dentro del sentido común. Al final, coches como el Seat León, el Volkswagen Golf o el Audi A3 también se podrían meter en este mismo carro, aunque es justo decir que esos casos los cambios son más profundos que un simple logo o el diseño de un faro.

Toyota iQ y Aston Martin Cygnet

Probablemente la colaboración entre marcas más loca de la historia. Aston Martin quería reducir su huella de carbono media y para ello decidió poner a la venta un pequeño utilitario súper eficiente para que sus clientes pudiesen ir por la ciudad como pez en el agua pero con el lujo clásico de Aston Martin. El resultado fue el Cygnet, un Toyota iQ con la piel de 10 vacas en su interior.

Citroën SpaceTourer, Toyota ProAce, Opel Zafira Life y Peugeot Traveller

Las grandes furgonetas siempre han protagonizado uniones entre marcas para que un mismo proyecto sea más atractivo. Actualmente, una de las uniones más interesantes es la que conforman el Grupo PSA con Toyota. Un mismo producto se vende exactamente igual (con cambios mínimos) en cuatro marcas bien diferenciadas: Citroën, Toyota, Opel y Peugeot. El ahorro de costes llevado a su máxima expresión.

Nissan Navara, Mercedes Clase X y Renault Alaskan

Como te decía las pick-up son vehículos con cierta demanda pero poco rentables. Por eso no sorprende que pocas marcas se atrevan al desarrollo en solitario de este tipo de vehículos. Nissan es experta en la materia y en el marco de colaboración entre el Grupo Renault y Daimler (que también dio como frutos la pareja que te debo justo debajo) fue la que desarrolló el pick-up que más tarde también acogieron en sus gamas Mercedes y Renault. Movimientos inteligentes.

Renault Twingo y Smart

Aunque te parezca chocante, ya que las diferencias estéticas son notables, el Renault Twingo y el Smart son básicamente el mismo coche. Su desarrollo fue conjunto, ya que Mercedes no tenía claro que pudiese rentabilizar un proyecto que desde sus inicios siempre ha sido deficitario. La solución fue repartirse los gastos junto a Renault y el resultado es un coche urbano muy interesante. Ya sea bajo la marca Renault o bajo el paraguas premium de Mercedes.

Toyota GT86 y Subaru BRZ

Por último llegamos al segmento de los coches deportivos. Últimamente también hemos visto algunas uniones curiosas, como la de BMW y Toyota para el desarrollo del Z4 y Supra respectivamente. Sin embargo, no he considerado ponerlo en esta lista ya que no son técnicamente gemelos, se quedarían en hermanos. El Toyota GT86 y el Subaru BRZ sí son hermanos gemelos: mismo coche, diferente logo y pocos cambios más. Una unión que podría repetirse en la segunda generación de este interesante deportivo.