Un accidente con un coche eléctrico tiene todos los números de ser siniestro total. El térmico no tanto

Accidente Tesla Model 3 Pikes Peak

Gustavo López Sirvent

El hecho de que tiene una batería (que habitualmente es el 50% del valor del coche eléctrico) que puede ver dañada sus celdas indivisibles, provoca que tenga que ser sustituida por completo, con lo que las aseguradoras prefieren no mojarse y declarar como siniestro el accidente.

Varios son los beneficios de adquirir un coche eléctrico: cero emisiones de CO2, no tener que gastar cantidades insultantes en gasolina o diésel o un menor mantenimiento. Pero también son varias las desventajas: el elevado precio de sus unidades, que en caso de incendiarse cuestan mucho de extinguir y que  tiene más probabilidades de terminar en un desguace que uno térmico.

Y todo redunda sobre un mismo foco: la batería. Es fundamental en los vehículos eléctricos  y de ella depende la autonomía que tenga ese coche, pero, a pesar de estar aseguradas para un tiempo bastante prolongado, si hay un siniestro es probable que pierdas tu ejemplar definitivamente. 

La ubicación de las baterías suelen estar situadas en los bajos del vehículo, protegidas convenientemente. Si por cualquier circunstancia falla pueden venir los problemas, que darían lugar a la obligación de repararla o sustituirla. Si te ocurre alguno de esos dos casos y sufres un accidente es probable que se declare el coche siniestro total y sea enviado al desguace. 

Dicen los expertos que la batería suele suponer el 50% del valor del vehículo y presenta una particularidad. En la mayor parte de los casos es un paquete de celdas indivisible. Además, se da la circunstancia de que hay fabricantes que prohíben a otros reparadores acceder a la información de sus células para evitar que haya copias y que pierdan su competitividad. 

Ha habido casos que aun habiendo percances sin apenas consecuencias para el vehículo y que se podría aprovechar la mayoría de las celdas, se ha obligado a sustituir todo el conjunto con lo que eso conlleva en cuanto a desembolso económico.

En la actualidad ya hay fabricantes que producen pilas por módulos que permitan cambiar solamente aquellos afectados. Pero aun así, siguen siendo legión los bloques inseparables fijados al chasis y que tienen difícil acceso. Este hecho provoca que las aseguradoras se laven las manos en caso de incidente y si detectan una batería con algún tipo de daños lo declaren como siniestro total. 

Además, has de saber que los precios de los seguros de los coches eléctricos son más elevados que os térmicos por esa misma razón. Ahora ya queda en el tejado de las administraciones poder cambiar las normas para que los propietarios de este tipo de vehículos no se encuentren con esta problemática en caso de un percance como el que hemos comentado.