Hace poco que conocimos la situación de Tesla en Suecia, con un desacuerdo respecto del convenio con algunos de sus trabajadores que desembocó en un boicot total a la marca en el país. Entonces, la tensión era evidente en torno a este asunto, pero ahora se añade otro factor más: Tesla ha demandado a dos agencias de Suecia por participar en las huelgas.

Para recapitular los hechos, todo surgió a raíz de la negativa de la marca de coches eléctricos de firmar un convenio con los mecánicos que trabajan para la firma. En este país no hay leyes que determinen cuestiones como el salario mínimo interprofesional, así que estos acuerdos son la principal regulación al respecto, pero la compañía californiana se negó a firmar algo así.

De esta forma, el sindicato IF Metall inició una huelga de mecánicos a la que posteriormente se han unido otros sectores. Por ejemplo, en los puertos se está negando la descarga de coches de la marca. Tampoco están los repartidores y carteros haciendo entregas a direcciones de la marca y de aquí surge el último movimiento del fabricante.

Según ha denunciado la compañía de Elon Musk y ha apuntado el medio Dagens Industri, no están recibiendo matrículas o documentos para sus coches. En teoría, sí están siendo creados por la Agencia de Transportes de Suecia, pero las entregas solo puede realizarlas Postnord y no se están llevando a cabo.

Ante esto, la marca estadounidense ha decidido demandar un millón de coronas suecas, que al cambio son unos 87.908 euros. Además, también ha solicitado poder recoger las matrículas y documentos directamente de la agencia, sin que la empresa postal tenga que intervenir hasta que se solucione la situación. 

Ahora bien, para que todo vuelva a su cauce, Tesla también ha interpuesto una demanda contra Postnord Sweden para que estén obligados a realizar las entregas. Según indica dicha empresa, su derecho a huelga cuenta como causa de fuerza mayor para pausar los envíos, pero la firma automovilística no está de acuerdo.

La bola no deja de crecer

Así, ahora quedará esperar para saber de qué lado se pone la justicia, pero parece que el boicot se le está yendo de las manos a la compañía de Elon Musk. A las partes que ya estaban participando en la protesta se han sumado miembros de Hydro Extrusions, una compañía noruega que es el principal proveedor de componentes de aluminio para Tesla en Europa.

Ahora, trabajadores de dicha empresa dejarán de producir piezas para estos coches eléctricos, lo que no solo afectaría a Suecia, ya que también salen de aquí componentes para otros países de nuestro continente. ¿Hasta dónde llegará la huelga?