Del Audi R8 eléctrico escuchamos hablar a menudo. El último en pronunciarse sobre él fue Anthony Garbis, product manager del Audi R8, que anticipó una posible llegada de la variante eléctrica del superdeportivo eléctrico pero no dijo nada al respecto sobre una posible colaboración con Rimac. ¡Sorpresa! 

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En las declaraciones de Garbis publicadas por los compañeros de 'Motor1' se daban a conocer pequeños detalles sobre el futuro de uno de los coches más pasionales de la marca de los cuatro aros. "Veremos que pasa... cuando las baterías lleguen a un punto en el que nos permitan construir un superdeportivo. Entonces veremos. Podría ser genial", explica Garbis. Con esto, queda claro que la compañía sigue interesada en electrificar al Audi R8, pero hay un factor clave que juega un papel muy importante en este proceso.

El rendimiento de las baterías y también el coste de las mismas está ocasionando más de un dolor de cabeza en los fabricantes de coches, así que es fundamental ser cauto antes de tomar decisiones que puedan convertirse en grandes errores. 

Sobre el precio de las baterías, es cierto que las marcas están cada vez están un poco más cerca de conseguir que sean rentables. "Si miras los gráficos y ves dónde estábamos y dónde estamos ahora, ahora estamos cerca de los 100 dólares [unos 89 euros] por kWh", matiza Garbis.

Todos quieren a Rimac

Ahora bien, una posible colaboración de Audi y Rimac, que jugaría un gran papel en su producción proporcionando, según los rumores, diversos e importantes elementos como las baterías y el tren de propulsión y ayudando a simplificar el proceso y los costes de su fabricación, cambiaría mucho las cosas. 

Y es que aunque el nuevo R8 eléctrico -que presumiblemente se llamaría Audi RS e-tron y llegaría en 2023 o 2024- se fabricaría en la planta de la marca de los cuatro aros en Bollinger Höfe (en Alemania), buena parte de su desarrollo se externalizaría y quedaría en manos de Rimac. 

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Pero no pienses que Audi es el único que está pensando en esto... Porsche ha comprado acciones en Rimac también, explicando que la compañía croata tiene ya una gran experiencia en el desarrollo de hiperdeportivos eléctricos, lo que les hace confiar en ellos para sus proyectos de futuro. 

Audi R8 eléctrico: el caso práctico que ayuda a entenderlo

Por si no lo recuerdas, entre 2015 y 2016, Audi lanzó 100 unidades del Audi R8 e-tron, un coche realizado a mano bajo petición que, en realidad, era más bien un capricho. Ofrecía más de 450 CV de potencia, 900 Nm de par, podía acelerar de 0 a 100 km/h en 3,9 segundos y tenía una autonomía eléctrica de 450 kilómetros. Y todo esto por cerca de 1 millón de euros...

Con el precio que hemos hablado antes que tienen hoy las baterías, si Audi se decidiera a utilizar la de 92 kWh de este R8 e-tron para un nuevo modelo, se estaría gastando en torno a 8.188 euros por unidad. Pero, ¿cómo aplicaría esto la marca al mercado sin saber si su superdeportivo eléctrico tendría éxito o no? No lo sabemos. Y nos tememos que ellos, de momento, tampoco.

Siendo honestos, el que se vendió en Europa en 2015 no tuvo demasiada buena acogida (ten en cuenta que su importe era diez vez superior al de un R8 con motor V8), así que como ves, el tema es más complicado de lo que parece. Está claro que la apuesta de Audi para el futuro es eléctrica y que tanto con su participación en la Fórmula E como con el desarrollo de sus coches de producción eléctricos, la compañía está ganando una gran experiencia.

Incluso ha creado un súper GT eléctrico, el Audi e-tron GT Concept, que verá la luz en 2020 y que promete grandes sensaciones y prestaciones derivadas, entre otros, de un centro de gravedad muy bajo equiparable al del Audi R8. A partir de ahí, el tiempo dirá...

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