Si tu disyuntiva vital pasa en la actualidad por comprarte un coche híbrido, híbrido enchufable, eléctrico, de combustión interna o de batería de hidrógeno, has de saber que si eliges esta propulsión deberás sacar Google Maps para encontrar estaciones donde repostar porque a día de hoy en España hay muy pocas.

Sabemos que el hidrógeno es un combustible alternativo a la gasolina y al diésel (sobre todo si miramos hacia los países del norte de Europa o Asia), donde hay un alto número de vehículos propulsados por esta energía.  

La Directiva 2014/94 de la Unión Europea obligaba a cada país miembro a desarrollar un Marco de Acción Nacional de Energías Alternativas en el Transporte antes de que finalizara 2016 y desde entonces ha ido dando pasos de tortuga. 

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El hidrógeno tiene un capítulo propio en la Directiva y, aunque el desarrollo de infraestructuras para su repostaje (hidrogeneras) es opcional, España lo consideró en su día dentro del Marco de Acción Nacional dado el potencial que supone para nuestro país.

A pesar de esa relativa obligatoriedad, en España vamos a la cola europea de hidrogeneras. Actualmente sólo hay seis estaciones, de ellas, tres son de uso público. Estos establecimientos de repostaje de hidrógeno en nuestro país están situadas en Madrid, Sevilla, Zaragoza (las tres públicas), Huesca, Albacete y Puertollano. 

Europa tiene 228 hidrogeneras, de las cuales 101 están en Alemania. Francia sigue ocupando el segundo lugar en Europa con 41 estaciones operativas, seguida del Reino Unido con 19, Suiza con 12 y los Países Bajos con 11 estaciones.

El objetivo del Gobierno español es acelerar el paso, ya que que el Estado se ha marcado construir una red superior a 100 hidrogeneras para 2030. 

¿Qué vale repostar hidrógeno?

El precio del hidrógeno combustible en nuestro país tiene un coste que puede oscilar desde 3-4 €/kg hasta los 10 €/kg, aunque tomando como referencia el precio de venta en hidrogeneras de otros países, el hidrógeno cuesta actualmente entre 8 y 10 euros por kilogramo.

Un precio a la altura de los modelos con motor de combustión, incluso más alto que la mayoría de los modelos del mercado. A eso añádele que repostar un coche de hidrógeno lleva entre tres y cinco minutos, así que es poco más que llenar un coche con combustible tradicional. 

Aun así, el hidrógeno es un gas y como tal, está sujeto al precio del mercado. Así que es importante saber que el precio puede variar bastante. También hemos de tener en cuenta que las tarifas se han reducido los últimos años, a medida que la tecnología para la obtención de este gas ha mejorado.