Desde su creación en 2022, la marca de coches Omoda va quemando etapas a una velocidad que sorprende. Empezó su andadura en Rusia y en un mercado tan exótico como es el de Kazajistán, aunque también está ya operativa en Sudáfrica, Chile, México... 

... y ahora España con el Omoda 5 que está dando sus primeros pasos en estos momentos. Se trata de un SUV bastante interesante que supone una apuesta fuerte en un segmento tan importante como es el de los SUV compactos o SUV C.

Pero a pesar de su juventud, tiene un importante as bajo la manga, y es que pertenece a Chery, un gigante chino que el año pasado se colocó como octavo fabricante mundial con 1,8 millones de unidades producidas. Además, SAIC, otro gigante estatal chino, posee el 20% del grupo.

Por eso, la posibilidad de que Omoda se instale en la Zona Franca de Barcelona para fabricar coches en España es una gran noticia, ya que supondría la creación de empleos en un sector vital para el país: el automóvil tiene una empleabilidad del 9% y supone el 8% del PIB. Además, somos el octavo país productor de coches del mundo.

En TOPGEAR.es hemos hablado con una fuente conocedora de las negociaciones en España y nos ha contado que las negociaciones con el Ministerio de Industria están muy avanzadas y que hay bastante interés y predisposición por las dos partes. La marca aún no se ha pronunciado. 

Aparte de Omoda, el grupo planea lanzar también dos coches en este 2024 bajo la marca Jaecoo que también es joven: nació en 2023 y está especializada en todoterrenos se la considera una especie de hermana de Omoda y en ocasiones en el grupo se refieren a ellos como O&J. Estos modelos también se ensamblarían en Barcelona.

Desde 2021 Nissan dejó la Zona Franca al salir de Europa, y desde entonces ha habido bastante proyectos que planeaban la creación de empleo, como el relanzamiento de la histórica marca Ebro, que fabricaría un pick-up eléctrico con esqueleto Nissan, y los industriales Zeroid.

En todo caso, también hemos podido saber que hay otros proyectos sobre la mesa, pero no son tan ambiciosos, ya que en el mejor de los casos supondrían 300 empleos, una cifra claramente inferior a la propuesta por Omoda.