El Toyota Prius ha vivido muchas vidas. Se convirtió en el primer coche híbrido en surcar las ciudades; pasó a ser el favorito de taxistas de medio mundo para después sufrir (sí, ni experimentar, ni recibir: sufrir) un restyling que lo condenó a la irrelevancia (lee la prueba del Prius de 2016).

La nueva generación de este Toyota, que es la quinta, sin embargo, parece decidida a volver a tomar el camino que dejo hace unos años con una imagen atractiva y muchas cosas buenas, como por ejemplo una mecánica híbrida enchufable de 223 CV que es capaz de hacer 85 km en modo eléctrico.

La parte buena termina aquí, ya que en la marca han decidido no vender su modelo en toda Europa, sino solo en algunos mercados escogidos, como Alemania, donde ha salido con un precio de 45.000 euros para la versión básica. Eso allí supone un sobrecoste de casi 7.000 euros con respecto a la anterior versión equivalente.

El Prius extremo de T-Demand

Seguramente hayas visto algunos Toyota Prius modificados a lo largo de los 25 años de vida de este héroe híbrido, desde motores diésel a eléctricos de Tesla, pero ninguno se parecía a este. 

Se trata de la versión del preparador japonés T-Demand, que ha instalado una suspensión neumática "AIRSUS" y ha bajado la altura del Prius al máximo, como mandan los cánones de las preparaciones JDM. 

A continuación, ha montado frenos nuevos con discos de 355 o 380 mm y pinzas de seis pistones y unas enormes llantas de aleación con una gran caída negativa. 

No se sabe nada de las mejoras de rendimiento, pero nos gusta imaginar que el motor de 2.0 litros y cuatro cilindros de serie se ha cambiado por un 2JZ híbrido, porque... ¿Por qué no?