Prueba del BMW Serie 2 Gran Coupé: tres volúmenes de elegancia

prueba del BMW Serie 2 Gran Coupé

Como esto siga así, el scroll en la web del configurador de BMW será más largo que el primer día de trabajo después de unas largas vacaciones... El último modelo en aterrizar es el coche de la prueba, el BMW Serie 2 Gran Coupé; una nueva opción de acceso a los ya existentes Serie 4 Gran Coupé y Serie 8 Gran Coupé, y nuevo un integrante que se une a la extensa familia del Serie 2.

Entre tanta serie -esta prueba parece el catálogo de Netflix- este variante de 4.526 mm de longitud, 1.800 mm de anchura y 1.420 mm de altura se sitúa entre el BMW Serie 1, al que saca 20 cm, y el Serie 3, con 20 cm más de longitud. Y si de números hablamos, cabe recordar que su maletero cubica 430 litros, 50 más que el compacto, pero 50 menos que la berlina del segmento D.

Prueba del BMW Serie 2 Gran Coupé

He tenido que fijarme dos veces para darme cuenta de que la parte frontal es diferente de la del Serie 1. Sí, los riñones son enormes, como marca el lenguaje de diseño de la casa alemana, pero la forma es diferente, acercándose más al estilo del Serie 8. También los faros, que son de nuevo cuño. Por algo dice mi madre que tengo los ojos llenos de pan...

El cambio más importante se aprecia de perfil con el tercer volumen que se ha añadido. Por tanto, la zaga también es nueva; quizá más alta que en los otros Gran Coupé de la compañía. Asimismo, incorpora unos pilotos bastante finos con forma de L que enfatizan la anchura de su prominente trasero, que por volumen podría pasar por el de Kim Kardashian.

BMW Serie 2 Gran Coupé: ¿por qué es mejor que un BMW Serie 1?

Abro la puerta, por cierto, las cuatro sin marco, y continúo la prueba del BMW Serie 2 Gran Coupé analizando el interior. Poco que examinar, la verdad, porque todo es igual que el Serie 1: buenos materiales, buenos ajustes, ausencia de plásticos duros y la consola orientada hacia el conductor... Todo es igual excepto el espacio para la cabeza en la segunda fila: poder presumir de una carrocería coupé es lo que tiene. Y es que solo es un dedo el que separa mi cabeza de rozar con el techo (mido 1,78 m). El panorama cambia con el de las rodillas, que es muy amplio. 

Prueba del BMW Serie 2 Gran Coupé

Se diferencia del Serie 2 Coupé en el número de puertas. Quizá para muchos sea la disparidad más importante; para mí no. Es el tipo de tracción, que ahora, como el Serie 1, es delantera, dejando de lado la divertida y más efectiva propulsión. Los tiempos cambian; las marcas también se adaptan.

El BMW Serie 2 Gran Coupé está disponible con tres motorizaciones, dos de gasolina, 218i (140 CV) y M235i xDrive (306 CV) y un diésel, 220d (190 CV), al que se unirá próximamente el 216d (116 CV). Los de acceso, que son tricilíndricos, pueden ir asociados a un cambio manual de seis marchas o a uno automático de doble embrague de siete. Los de cuatro, únicamente con la automática, solo que con ocho. 

He tenido la oportunidad de probar los dos de gasolina, que, obviamente son la noche y el día. El de tres cilindros rinde 140 CV, una cifra alta que en marcha parece bastante algo más pobre, incluso en modo 'Sport'. También he de decir que son suficientes para cualquier mortal que quiere un coche para uso diario y realizar viajes con él -llama la atención lo bien insonorizado que está-, pero es cierto que me esperaba algo más de garra. No tiene tacha ni la dirección, rápida, precisa y de buen taco; ni la suspensión, cómoda, pero mantenido el coche firme en curva. 

Prueba del BMW Serie 2 Gran Coupé

Para vivir unas sensaciones más racing está el BMW Serie 2 Gran Coupé 'gordo', el M235i xDrive. Bajo el capó se halla el bloque de cuatro cilindros más potente de la historia de la marca. Esos cuatro pucheros junto con el escape consiguen un sonido más deportivo. No solo es la melodía que emite, también el torrente de potencia que entrega a bajas y de forma rápida, muy rápida; ten en cuenta que los 450 Nm de par máximo son entregados desde solo 1.750 vueltas. Para mejorar aún más el paso por curva se ha modificado la suspensión, que es especifica y más deportiva y se han montado nuevas estabilizadoras. También tengo a mi disposición modos de conducción si quiero tranquilizar a la bestia... 

Existen tres líneas de equipamiento, Luxury, Sport y M Sport, que se suman a la de entrada. Con esta última, el BMW Serie 2 Gran Coupé de la prueba tiene un precio de partida de 31.100 euros, que se convierten en 58.900 euros si se trata del M235i xDrive. El acabado base incluye climatizador, sensor de lluvia, sensor de aparcamiento, tanto delantero como trasero; faros LED, velocidad de crucero y llantas de 16”, entre otros elementos. Subiendo de nivel, el 2 Gran Coupé puede montar lo último del mercado como 'head-up display' -primera vez en la Serie 2-, iDrive Controller -para controlar las funciones del vehículo mediante el tacto, la voz o gestos; Parking Assistant Reverse, con el que deshace marcha atrás el recorrido que el coche haya realizado hacia delante; apertura de puertas con el smartphone, Android Auto y Apple Car Play sin cables y asistente virtual ("Hola, BMW"), entre otros varios.

Precios del BMW Serie 2 Gran Coupé

VersiónPotenciaCambioPrecio
218i140 CVManual31.100 euros
218i140 CVSteptronic 7 velocidades32.089 euros
216d116 CVSteptronic 7 velocidades33.800 euros
220d190 CVSteptronic 8 velocidades41.500 euros
M235i xDrive306 CVSteptronic 8 velocidades58.900 euros

Nuestro veredicto

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