Diésel azul: tres preguntas y sus respuestas para tenerlo controlado

Qué es el Diésel R33, el nuevo diésel azul que revolucionará las gasolineras
Azul es mucho más que un simple color

El diésel azul ha llegado a nuestras vidas para quedarse.... y bueno, para crear confusión entre millones de conductores que no tienen muy claro qué es exactamente, para qué sirve o qué beneficios puede traer frente al diésel convencional. 

No te pierdas: El Gobierno retira la prohibición a los coches diésel a partir de 2040

Lo primero que debes saber sobre el también conocido como Diésel R33 es que aún no está disponible en ninguna gasolinera, pero sí que está aprobado por la normativa europea como combustible compatible con todos aquellos vehículos propulsados por gasóleo. 

El diésel azul traerá consigo un nuevo y gran cambio para los coches, eso seguro, y aunque conocer todos sus secretos y detalles técnicos puede suponer mucho tiempo (y algún que otro dolor de cabeza), a continuación puedes leer sus principales claves para que su llegada al surtidor no te pille desprevenido. 

Diésel azul: ¿en qué se diferencia del diésel convencional?

Nuevas etiquetas gasolineras

El diésel azul (BlueDiésel o Diésel R33) promete reducir las emisiones de CO2 en un 20% frente al diésel convencional. Y no, no busques nada más porque no lo hay: no hay diferencias en el consumo, ni tampoco habrá cambios -para bien ni para mal- en las prestaciones o comportamiento del vehículo. Se distingue porque es más respetuoso con el Medio Ambiente. 

Diésel azul: ¿y de dónde procede?

¿Te has preguntado alguna vez que hacen con el aceite reciclado? No el del coche, sino el que utilizas para hacerte unos filetes. Pues ¡bingo!, ya tienes respuesta a la pregunta sobre la procedencia del diésel azul. Se trata de un biodiésel fabricado a partir de los residuos y parafinas obtenidas del aceite de cocina usado (un 33%). 

Diésel azul: ¿quién está detrás de todo esto?

Volkswagen R33 Bluediesel

¡Volkswagen! La compañía de Wolfsburgo es la que ha puesto en marcha este proyecto, que también cuenta con la colaboración de empresas como Shell Global Solutions y Bosch, con el objetivo de popularizar sus virtudes, demostrar que el Diésel R33 cumple con la normativa DIN EN 590 -que asegura su compatibilidad y los criterios de calidad- e incluso de ponerlo a prueba, repostando su flota de vehículos con este combustible en Alemania.