Los 5 mejores coches de carreras de Ferrari

Ferrari F2004

Ferrari cuenta con una historia competitiva llena de triunfos y grandes coches, junto a momentos no tan brillantes. Aun así, estas son las 5 mejores máquinas de circuito de su historia.

Pocas marcas tienen una historia en competición tan longeva como la de Ferrari. Esto quiere decir que la marca italiana ha construido algunos de los modelos más sobresalientes que hayan pisado un circuito. Por ello, para recordar a algunos de ellos, hoy os traemos una lista de los 5 mejores coches de carreras de Ferrari.

Texto original de Jason Barlow

Ferrari 250 Testa Rossa

Ferrari 250 Testa Rossa

El 250 Testa Rossa se eleva a sí mismo sobre una base puramente estadística gracias a sus tres victorias en las 24 horas de Le Mans -1958, 1960 y 1961-, que llevaron a Ferrari a ganar títulos de constructores en esos mismos años. Pero el TR no es solo números, ya que también es más bonito que casi cualquier otro coche de carreras. 

Los Testa Rossa más conocidos se encontraban entre los primeros 34 fabricados y presentaban la carrocería 'pontón', cuyas aletas delanteras eran una ayuda improvisada para el enfriamiento de los frenos. Fue idea del legendario fabricante modenés Sergio Scaglietti pero, al demostrarse que no era algo estable a altas velocidades, se introdujo una carrocería más convencional. 

Este coche de carreras de resistencia, el más aclamado, se conformó inicialmente con frenos de tambor, un chasis robusto -aunque pesaba 794 kg-, una caja de cambios de cuatro velocidades y una parte trasera con suspensión de ballesta. 

En efecto, esto último no era particularmente avanzado, incluso en 1958, pero era efectivo. Eso sí, los posteriores coches obtuvieron un eje trasero De Dion y carrocerías más eficientes en el apartado aerodinámico.

Ferrari 156 'Nariz de tiburón'

Ferrari 156 'Nariz de tiburón'

En 1961, las nuevas reglas técnicas de la Fórmula 1 redujeron el tamaño del motor de 2,5 a 1,5 litros, y Ferrari entró en la refriega con el 156 'Sharknose', un coche que ganaría cinco de los ocho Grandes Premios de esa temporada. 

El diseñador de motores Carlo Chiti había producido un nuevo V6 con un ángulo en V de 120°, lo que le permitía colocarlo más abajo en el chasis para optimizar el centro de gravedad y la rigidez estructural. Sin duda, era una solución inteligente y esto se tradujo en unos buenos resultados en pista.

Por ejemplo, el piloto estadounidense Phil Hill y su compañero alemán Wolfgang von Trips ganaron dos carreras cada uno. Además, el italiano Giancarlo Baghetti sobrevivió a un dramático GP de Francia en Reims, superando a Dan Gurney y venciendo. Sigue siendo el único piloto en ganar una carrera de F1 en su debut y fue su única vez en el escalón más alto del podio. 

Finalmente, Hill se llevó el campeonato de pilotos, pero la victoria fue agridulce: Von Trips se estrelló en Monza, matándose a sí mismo y a 14 espectadores. El accidente también puede explicar por qué Enzo Ferrari ordenó que se destruyeran todos los 156. Se dice que algunas de las partes aparentemente terminaron mezcladas con el cemento para un nuevo suelo de la fábrica.

Ferrari 250 GTO

Ferrari 250 GTO

El Ferrari más famoso de todos comenzó su vida como una respuesta pragmática a la intensificación de la competencia en el ámbito mundial de las carreras de deportivos. El chasis era similar al 250 GT SWB y consistía en un marco de acero tubular. Además, hubo novedades en componentes clave como la caja de cambios, el radiador y los tanques de combustible y aceite. 

La mayoría de los GTO tenían dos tomas de aire de refrigeración en las aletas delanteras, pero algunos tenían tres. Asimismo, la carrocería fue rediseñada y cambios aerodinámicos tentativos redujeron la sustentación en la parte delantera y mejoraron la carga aerodinámica trasera. 

El proyecto fue inicialmente supervisado por Giotto Bizzarrini, quien pronto dejaría la fábrica durante la notoria 'revolución del palacio' a finales de 1961. De esta manera, el viejo amigo de Enzo, Sergio Scaglietti, recibió la tarea del jefe de completar el coche. 

Por lo general, ninguno de los 36 GTO fabricados en la primera producción de 1962 a 1964 era idéntico. Todas las carrocerías fueron batidas a mano en aluminio sobre marcos de madera por los artesanos de Scaglietti, de manera que había muchas diferencias: algunas cosméticas, pero otras más empíricas y enfocadas en la ingeniería. Aun así, fue y es un coche excepcional.

Ferrari 312T

Ferrari 312T

El visualmente impactante Ferrari 312 T hizo su debut en el GP de Sudáfrica de 1975: la T significaba la caja de cambios montada transversalmente del automóvil, que mejoró sustancialmente el equilibrio de manejo del monoplaza. Aun así, esto no supuso unos buenos resultados inmediatos.

Niki Lauda no logró terminar por encima del quinto lugar en las primeras cuatro carreras de la temporada, con un retiro en un trágico GP de España. Las victorias finalmente llegaron en Mónaco, Bélgica, Suecia y los EE.UU., mientras que su compañero de equipo Clay Regazzoni triunfó en Italia. Lauda se llevó el título de pilotos y Ferrari el de constructores, el primero desde 1964. 

El 312 T usaba un chasis monocasco de aluminio y un sistema de suspensión rediseñado que permitió al director técnico Mauro Forghieri y su equipo estrechar el frontal, mejorando su eficiencia aerodinámica. Además, su motor de 12 cilindros era fiable y entregaba unos 505 CV. 

Como detalle, el distintivo air box superior fue prohibido por el nuevo reglamento de la temporada de 1976, el que Lauda tuvo la suerte de sobrevivir tras su terrorífico accidente en Nürburgring. Aun así, el 312 T se volvería más llamativo a medida que evolucionaba durante los años setenta, ganando una nariz inusualmente ancha.

Ferrari F2004

Ferrari F2004

En el automovilismo, existe la tentación de pensar que todo en el pasado fue de alguna manera mejor. Sin embargo, cuando se trata del F2004 de la escudería de Fórmula 1 de Ferrari, es inútil resistirse a ese pensamiento. 

No es tan bonito como el 312 de 1967 o el 641 de 1990, pero fue mucho más exitoso, una obra maestra con motor V10 que llevó a Michael Schumacher a su séptimo y último título mundial de F1. Ganó 13 de las 18 carreras de esa temporada, y su compañero de equipo, el brasileño Rubens Barrichello, se llevó otras dos victorias. 

El dominio del F2004 se pasa por alto un poco porque marcó el cenit de la era de Ross Brawn/Rory Byrne/Michael Schumacher, un período triunfal que produjo cinco títulos consecutivos de pilotos y seis de constructores. Este fue un récord que invariablemente llevó a la audiencia a la fatiga, incluso aunque los miembros de Ferrari se divirtieran. 

Curiosamente, la naturaleza de los neumáticos Bridgestone del F2004 significó que el Ferrari no fuera tan dominante en las sesiones de clasificación -solo logró 12 poles-. Sin embargo, los gurús del coche, el piloto y la estrategia se combinaron para asegurar resultados de carrera increíbles. Y si nos ponemos a hablar de ese motor... Caramba.