Son grandes noticias para la industria del coche eléctrico: Bentley se ha comprometido con un plan que supondrá el lanzamiento de un nuevo automóvil eléctrico por año desde 2025 hasta 2030.

Se trata de toda una declaración de intenciones de la marca británica y que parece estar respaldada por una inversión de 2.500 millones de libras esterlinas con el objetivo de transformar toda la gama de productos de Bentley.

Aunque el aspecto de estos futuros nuevos coches eléctricos es una incógnita, el CEO de la marca, Adrian Hallmark, ha asegurado que los modelos actuales como el Bentley Bentaygam, Flying Spur y el propio Bentley Continental GT tendrán su versión electrificada en algún momento.

Prueba retro del Bentley Continental R

Una tendencia general del Grupo Volkswagen

Como parte de su compromiso Beyond100 lanzado a finales de 2020, Bentley ya anunció que para 2026, todos sus coches serían híbridos enchufables o completamente eléctricos; y que en 2030 la compañía sería completamente neutral en emisiones de carbono.

Para lograr este objetivo a nivel industrial, aumentarán en su sede en Crewe de 30.000 a 40.000 paneles solares, y su flota de coches y colección histórica funcionarán con biocombustibles.

Una estrategia coherente en el seno del Grupo Volkswagen, ya que hay que recordar que Bentley y Audi colaborarán a través del Proyecto Artemis de una plataforma y tecnología común electrificada de cara al futuro junto a la propia Volkswagen.

La planta de Hannover será el punto de partida de la próxima generación de coches eléctricos del Grupo VAG y el terreno en el que colaborarán las citadas marcas salvo Porsche, que ha decidido independizarse de la apuesta y emprender su aventura en solitario.