En los coches eléctricos la frenada es vital. Y por eso esta prueba alemana tiene importancia

BMW i7 M70

Gustavo López Sirvent

El Club General de Automovilistas Alemanes o ADAC realizó un test con el Tesla Model Y, el BMW i7 y el Dacia Spring y la berlina de la compañía alemana fue el que más energía recuperó con el 50% y recobró 26,27 kWh en el tramo cuesta abajo. También es el que más pesa, por lo que genera más energía al frenar.

Dicen los expertos que los vehículos eléctricos de gran tamaño, estilo Tesla Model Y o BMW i7 precisan de un buen sistema de frenos para que se detengan. Pero tienen una gran ventaja respecto a los propulsores de combustión interna y es que los de cero emisiones pueden recuperar parte de esa energía para usarla en otro momento.

El Club General de Automovilistas Alemanes o ADAC, probó tres vehículos, de los que dos eran de gama alta (los citados Model Y y BMW i7) y otro de gama media-baja (el Dacia Spring). Y hay veces que el dinero sí da el poder, como veremos a continuación.

El coche de la casa de Múnich salió vencedor de todas las comparativas. Es el que más energía recupera (50%) y recobra 26,27 kWh en el tramo cuesta abajo de una carretera montañosa de Baviera. En segundo lugar está el Tesla, que l 40 por ciento, habiendo aprovechado 17,6 kWh. Y último, el coche rumano con sólo 7,05 kWh de energía consiguiendo un 35% de recuperación.

Aparte, la berlina del coche alemán tiene una tasa máxima de carga de recuperación en descenso del 55 kW, que es más de lo que el Dacia puede recoger en una estación de carga. También debemos tener en cuenta que pesa mucho más, lo que quiere decir que genera más energía al frenar.

Si miramos el peso de cada uno, vemos que el Spring dio en la báscula 1.180 kg. El Tesla pesaba 2.186 kg. Y el BMW llegó a la abultada cifra de 2.830 kg.

 El peso en vacío del humilde Spring significaba que consumía la menor energía al subir la colina, mientras que el BMW consumía la mayor cantidad. Combinando la energía total consumida tanto en la subida como en la bajada del recorrido de prueba, el Dacia obtuvo un consumo de 9,65 kWh/100 km, el Tesla 15,57 kWh/100 km y el BMW 16,54 kWh/100 km.

Las subidas y bajadas en conducción extrema que se han llevado a cabo en esa prueba de montaña no reflejan el tipo de manejo al que están sometidos la mayoría de los vehículos eléctricos, por lo que ADAC decidió realizar más pruebas en laboratorio. Así que experimentó con 19 coches eléctricos diferentes para ver cómo les fue en condiciones WLTP. 

El estudio demostró que los vehículos eléctricos recuperan un promedio del 22 por ciento de la energía generada al frenar en este escenario de terreno llano, pero nuevamente hubo grandes diferencias de un automóvil a otro. El Nio ET7 obtuvo la mejor puntuación, recuperando el 31 por ciento de su energía, mientras que el Dacia Spring sólo recuperó el 9 por ciento.

En esa lista de la asociación alemana hay algunos vehículos que bajan del 20 por ciento como es el coche de Mioveni que ya hemos citado, el MG 5 Long Range (19%) el Ora Funky Cat (18%) o el el Cupra Born (16%).

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