Dodge Charger Super Bee: un apellido icónico para despedir un coche emblemático

Dodge Charger Super Bee 2023

Dodge resucita una de sus nomenclaturas más especiales

La despedida de uno de los muscle car más icónicos, el Dodge Charger, está cerca. Al menos, es así en su configuración tradicional, con el motor V8 bajo el capó. Por ello, la marca americana ha pensado en lanzar siete ediciones limitadas que marquen el fin de esta época y esta es una de ellas. Así es el Dodge Charger Super Bee.

El apellido Super Bee asociado a este modelo ya se pudo ver a mediados de los 2000, pero esta variante pretende ser más especial. Al fin y al cabo, se trata de un apellido emblemático que ya se vio a finales de los años 60 en el Dodge Coronet. Es esa referencia a la tradición la que ha querido remarcar el fabricante estadounidense en un momento de cambios como este. 

Antes de la llegada del muscle car eléctrico, ya presentado con el Dodge Charger Daytona SRT Concept, llega esta versión de producción limitada. Tan solo se ha previsto la fabricación de 1.000 unidades y contará con dos variantes, de 500 ejemplares cada una.

Dodge Charger Super Bee 2023

Aquellos que compren este modelo podrán elegir entre la configuración convencional y la Widebody, de carrocería ancha. Se trata de dos opciones que coinciden en los aspectos esenciales, pero que tienen un enfoque distinto. Si bien la primera está más orientada al uso habitual de este tipo de coches, la segunda tiene su mirada puesta en las pistas de drag.

Aun así, antes de nada, conviene enumerar las similitudes entre ambos. El diseño del Dodge Charger Super Bee se caracteriza en todos los casos por varios detalles estéticos como unos vinilos especiales, nuevos emblemas, un capó con una gran toma de aire y unas nuevas salidas de escape de SRT.

Además de esto, en lo que se refiere a su rendimiento, bajo el capó está lo importante: aquí se encuentra el inconfundible motor V8 HEMI de 6,4 litros con 490 CV. Así, esta mecánica está también acompañada de otros detalles enfocados a un mejor comportamiento en marcha, como unos frenos Brembo con pinzas de cuatro pistones y un sistema de suspensión adaptativa.

Dodge Charger Super Bee 2023

Todo esto es lo que define al modelo convencional y de carrocería ancha. Ahora bien, cada uno de ellos cuenta también con sus toques específicos. Por ejemplo, el primero se ofrece pintado en el color azul B5 Blue, mientras que el Widebody muestra el morado Plum Crazy, que recuerda a algunos deportivos de la marca de finales de los años 60.

Junto a esto, otra diferencia evidente entre estas configuraciones está en la anchura de la carrocería, pero hay otro cambio estético más: el “normal” monta llantas de aleación de 20”, pero el ancho utiliza unas de 18” con neumáticos de 315 mm pensados para carreras drag. De hecho, incluso la suspensión cuenta con un modo específico para ello.

De esta forma, el Dodge Charger Super Bee estará pronto de nuevo en el mercado, por un precio que aún no se ha dado a conocer, aunque se espera en torno a unos 85.000 dólares -unos 83.600 euros-. Si es mucho o poco, depende del criterio de cada uno. Eso sí, una cosa es segura: las 1.000 unidades no tardarán en encontrar dueño…

Etiquetas: Muscle car, Motor