Los BMW M3 y M4 más especiales de la historia

Cada generación del BMW M3 ha tenido una versión más potente, más apasionante, más eficaz, más deseada. Te las presento, ¡ponte cómodo!

El nuevo BMW M4 GTS se convierte en la versión más salvaje, deportiva y cara del M4. Pero esta bestia nacida de las entrañas de BMW M no ha surgido de la nada, nace de más de 25 años de tradición deportiva sin concesiones, de exclusividad, de pasión por la efectividad. Desde el primer BMW M3 E30 siempre han existido versiones especiales y más emocionantes. Hoy voy a repasar todas y cada una de ellas, con cinco galerías de fotos para conocer todos sus detalles. ¿Me acompañas?

 

BMW M3 Sport Evolution

En 1985 nacía el BMW M3 pero no iba a ser hasta 1990 cuando nacería la primera versión ‘extra-deportiva’ de un M3. Como era normal en la época, nació como una versión especial para poder homologar el coche ante el reglamento de la FIA y solamente se construyeron 600 ejemplares. Se llamaba BMW M3 Sport Evolution y contaba con modificaciones de importancia con el objetivo de aumentar su rendimiento en circuito, tanto a nivel mecánico como de chasis.

Estéticamente los cambios también eran perceptibles. El BMW M3 Sport Evolution contaba con un paragolpes delantero específico y un nuevo alerón trasero: los compartía con el modelo de competición y se podían regular en diferentes posiciones, lo que permitía modificar la carga aerodinámica al gusto del piloto.

Cumpleaños de una leyenda: ¡BMW M3 30 aniversario!

Se suprimieron los faros antiniebla, sustituidos por conductos de ventilación para los frenos delanteros, y solamente se fabricaron en dos colores: Negro Jet o Rojo Misano. El objetivo principal era reducir el peso y por ello se uso un depósito de combustible más pequeño, un escape de titanio o ventanillas más ligeras: se ahorraron 35 kg. Con 238 CV, se ha convertido en un objeto de culto y su precio se ha disparado en los últimos años. 

 

BMW M3 GT

La segunda versión especial del BMW M3 utilizaba la misma fórmula: más potencia, menos peso. El BMW M3 GT nació en 1995 y es uno de los más escasos de la historia de este modelo: solo se produjeron 350 unidades y estaba basado en la primera generación del M3 E36, por lo que bajo el capó encontrábamos el seis cilindros en línea de tres litros y no el 3.2.

En el apartado estético se podía distinguir por el color: solo se fabricó en verde o en plata. Contaba con elementos exclusivos como un paragolpes específico o el alerón trasero. Para ahorrar peso se sustituyeron las puertas de serie por unas de aluminio más ligeras. Gracias a los 295 CV y al menor peso conseguía acelerar de cero a cien en 5,2 segundos.

 

BMW M3 CSL

CSL son ya unas siglas que representan la deportividad más pura en un M3. Lamentablemente esas siglas solamente se utilizaron en el BMW M3 E46. ¿Qué significaban? ‘Coupé, Sports, Lightweight’. Coupe, deportivo y ligero. Este BMW M3 CSL fue especial ya que fue una de las primeras ocasiones en las que se utilizaba la fibra de carbono de manera generosa, en elementos como el techo o el soporte del paragolpes delantero.

Se ahorraban un total de 180 kg respecto al M3 E46, una cifra muy considerable, mientras que el motor también se modificó, pasando de 343 CV a 360 CV. La aceleración de cero a cien se rebajó hasta los 4,6 segundos y una potencia específica de 111 CV por litro. Estéticamente los cambios afectaban especialmente al frontal, con un nuevo paragolpes, y a numerosos detalles tanto en el exterior como en el interior. Una joya cuyo precio no hace más que subir.

BMW M3 GTS

Es curioso como BMW ha conseguido dar a cada versión especial un carácter único. El E30 era una versión homologada de un coche de competición, el GT era más que nada un producto de marketing, el CSL buscaba la máxima ligereza mientras que este BMW M3 GTS era prácticamente un coche de carreras homologado para la carretera. Es el más exclusivo: solamente se fabricaron 138 ejemplares y su motor V8 rendía 30 CV más.

El objetivo de este coche era mejorar el comportamiento sobre la pista y fuera de ella, por eso se quitaron los asientos traseros y se instaló una jaula de seguridad que tenía un doble propósito: maximizar la seguridad y como anclaje para los cinturones de seguridad de seis puntos. Los backets de competición o el espectacular alerón trasero en fibra de carbono eran protagonistas en el M3 más exclusivo de los últimos años.

 

BMW M4 GTS

Con la nueva denominación (M4) se mantienen las siglas GTS para crear un coche que tiene un poco de todos los coches anteriores. Su producción se ha limitado aunque no tanto como en el M3 GTS: se fabricarán 700 ejemplares. Todo en este coche es más bestia y se ha creado para conseguir un nivel de prestaciones alucinante. Su motor de seis cilindros alcanza ahora los 500 CV y gracias a la rebaja del peso, el BMW M4 GTS consigue acelerar de cero a cien en 3,8 segundos y alcanzar los 305 km/h.

Una jaula de seguridad sustituye a los asientos traseros para mejorar la rigidez general y se incorporan elementos muy novedosos como los pilotos traseros con tecnología OLED. Además, monta muchos elementos fabricados en fibra de carbono y el peso se ha conseguido rebajar hasta los 1.510 kg. ¡Incluso las llantas se pueden pedir, de manera opcional, en este noble material! Una muestra muy patente de que las versiones especiales en los BMW M3/M4 siguen muy vigentes. Una joya que nace clásico desde el primer momento de pisar el asfalto.