Así es el Lotus Elise Cup 250 2017, amiguitos...
Texto: Rowan Horncastle
Di hola al nuevo Lotus Elise Cup 250 2017; se trata del cuatro cilindros más rápido que ha salido de Norwich y es uno de los que suscribe la filosofía de cada ‘lavado de cara’ de la marca: se añade potencia y se restan kilos.
Habiéndose zampado una buena cantidad de materiales ligeros y caros (fibra de carbono, titanio, aluminio, esas cosas), el peso se ha reducido a los 884 kg para la versión más ‘rellenita’… o a 860 si pides todas las opciones livianas. Éstas incluyen algunos paneles de la carrocería y del interior en fibra de carbono y un sistema de escape de titanio que cuesta 4.587 euros (al cambio en libras).
El nuevo Lotus Elise Cup 250 está impulsado por un motor 1.8 de 246 CV, mientras que el par es de 250 Nm. Mediante una sencilla operación matemática, deducimos que la relación potencia/peso es de 282 CV/tonelada. Eso significa que si juegas con las seis marchas de su caja de cambios manual, puedes pasar de 0 a 100 en sólo 3,9 segundos, mientras que la velocidad máxima es de 247 km/h.
Quizá ya te hayas dado cuenta de que este Lotus Elise estrena frontal: tiene la misma cara feliz que los Elise Sport y Sprint. Otros cambios destacables incluyen un frontal rediseñado y más ligero y una parrilla con un patrón más actual. La zaga muestra líneas que enmarcan dos grupos ópticos, en lugar de cuatro. Modificaciones enormes, como ves.
¿De carreras? Echa un vistazo al Lotus Elise Race 250.
Una suspensión de doble brazo independiente con estabilizadoras configura la amortiguación delantera. Con el fin de evitar que tu Lotus Elise Cup 250 acabe una y otra vez entre los arbustos, este coche deportivo biplaza con propulsión trasera tiene un ESP graduable en tres niveles: Drive, Sport y Off. Como te imaginarás, la diversión de verdad está en Off.
El Elise Cup 250 cuesta 54.365 euros (de nuevo, al cambio en libras). Aunque, si quieres disponer de la afamada ligereza de Lotus, tendrás que rebuscar un poco más bajo los cojines del sofá, ya que todas esas opciones que ahorran peso añaden 21.100 euros a la factura. Súmalo; con ese dinero puedes comprar un Porsche 911. Pero no puedes poner precio a la pureza, ¿verdad?
