Cuando Lamborghini pisa el acelerador con algún proyecto nuevo, se entera todo el mundo y el planeta automotriz está más que atento al movimiento de la marca del toro. Y lo ha habido. La compañía italiana ha sido sorprendida probando el que, presuntamente, va a ser el sucesor del Aventador, que probablemente sea híbrido enchufable.

Unas imágenes captadas por el youtuber italiano Varryx han dejado entrever una mula de prueba. Este superdeportivo, que está en plena fase de perfeccionamiento y, por las informaciones que llegan, puede presentarse en marzo de este mismo año. 

Hablan voces autorizadas que será un deportivo un híbrido, seguramente enchufable. A nivel de fábrica, lo han catalogado como el modelo LB48H, que, en principio, mantendrá en la parte térmica el motor V12 y la marca debutaría con el propulsor híbrido en modelos de calle.

A pesar de los rumores del híbrido enchufable, en la firma italiana se aprestan a desmentir que no será un bloque tan grande como el que montan los SUV (el Urus, sin ir más lejos tiene una batería de  17,9 kWh), sino a uno más pequeño, sobre todo para reducir el peso final del vehículo y que la dinámica de conducción no sufra excesivas alteraciones.

La parte de combustión interna instalará un motor V12, lo que asegura potencias cercanas a los 900 CV, si bien estas cifras no son oficiales. 

Al igual que con la mayoría de los prototipos Aventador de próxima generación que hemos visto, el escape en ambas salidas sale desde lo alto de la carrocería, aunque este parece ser cuatro tubos que se juntan en dos y luego salen por la parte trasera del coche. Aparentemente, esos tubos son para las pruebas de emisiones, que tanto preocupan a la marca.

Recordemos que Lamborghini se ha fijado el objetivo de reducir a la mitad sus emisiones de dióxido de carbono en 2025. 

Presumiblemente, estos tubos miden las partículas que salen del escape para que los ingenieros puedan presentar los datos a varias empresas de emisiones para dar por concluido el coche antes de ponerlo en venta.

Según la compañía del toro, la estética del heredero del Aventador variará bastante. Por lo poco que se ha visto, se dejan entrever unas puertas de apertura en tijera y un frontal diferente. En su interior también se atisba un cuadro de mandos digital y en el centro del salpicadero aparecerán otras dos pantallas, una para el sistema multimedia y otra para el climatizador.

Los fanáticos que se pueden permitir desembolsar lo que valdrá el recambio del Lamborghini Aventador ya están ansiosos. Tanto que que ya hay 3.000 reservas. Y eso sin conocer el precio del nuevo coche. El que va a pasar a la historia vale 382.000 euros en su versión básica.