La increíble historia del Peugeot 309: ¡así nacieron los Peugeot compactos!

Peugeot 309
Un coche único en su especie y en la historia de la marca.

El Peugeot 309 es un coche curioso. Todos lo tenemos en mente pero cuando piensas en él, cuesta incluso catalogarlo. La historia del Peugeot 309 empezó en otra marca, en Talbot, pero puso las bases de lo que más tarde serían los 306, 307 y 308. Coches importantísimos en la historia de Peugeot. Pero el nacimiento de esta nueva gama de coches compactos intermedios de Peugeot fue más apasionante que la de sus competidores.

Y es que la historia del Peugeot 309 no se puede entender sin tres otras marcas: Chrysler, Simca y Talbot. ¡Nombres importantes en la historia del automóvil del Siglo XX! El embrión del Peugeot 309 se puso en 1967, cuando Chrysler compró el Grupo Rootes, que incluían a marcas como Sunbeam y Talbot, y lo fusionó con la marca francesa Simca. De ahí nació Chrysler Europe, quizás una de las peores decisiones empresariales de la historia de Chrysler.

¿De dónde nació el Peugeot 309?

El principal producto resultante de todas estas compras y fusiones fue un coche: el Talbot Horizon. Quizás fue el producto más popular que desarrolló Chrysler Europa. Fue diseñado en Inglaterra pero desarrollado a nivel técnico en Francia por Simca. Lo más curioso de este compacto es que se vendió con cinco marcas diferentes: Chrysler, Simca y Talbot en Europa y Dodge y Plymouth en Estados Unidos.

Talbot Horizon

Era un compacto bastante simpático y con proporciones que podrían ser las de un compacto del Segmento C actual. Además, no funcionó mal a nivel comercial. La cuestión es que el sueño de Chrysler de hacerse grande en Europa no funcionó y en 1978 la empresa fracasó. Peugeot entró en acción y compró Chrysler Europa. Un momento clave para el futuro Peugeot 309.

El coche se siguió comercializando bajo las marcas Talbot y Simca en la mayoría de países europeos, pero desde que Peugeot entró en acción, rápidamente se empezó a trabajar en su sustituto. 

Proyecto C28, el sustituto del Talbot Horizon

Peugeot se puso manos a la obra para crear un sustituto para el Horizon. Un vehículo que se colocaría por encima del 205 pero por debajo de las berlinas que estaban representadas por el 305 y más tarde por el 405. El primer embrión del 309 nació en 1982, con el lanzamiento del Peugeot VERA Plus Concept, un vehículo que principalmente trabajaba el apartado aerodinámico.

Peugeot 309

Sin embargo, sus líneas maestras se pueden ver perfectamente en el 309 final de producción. Pese a ser un Peugeot, el coche se desarrolló bajo el equipo formado en la época de Chrysler, ya que el coche se diseñó en el estudio de Talbot en Coventry, Inglaterra, mientras que el desarrollo técnico fue obra de los ingenieros de Simca en Poissy, Francia.

Hasta este momento, el 309 iba a ser bautizado como Talbot Arizona, pero finalmente PSA decidió prescindir de la marca Talbot y bautizarlo como Peugeot. Su producción arrancó en la planta de Simca en 1985 y tenía varias peculiaridades: no estaba diseñado por Pininfarina, com los Peugeot de su época, y contaba con motores Simca, muchos de ellos derivados del Horizon.

Peugeot 309, un éxito rotundo

No entraré en detalle de todas las gamas mecánicas del Peugeot 309, pero sí se puede afirmar con seguridad que este coche fue un éxito rotundo para la marca francesa. La llegada de los motores diésel en julio de 1986, así como el Peugeot 309 GTI lanzado en 1987. Poco a poco se fueron sumando nuevas versiones, motores más potentes y eficientes y un restyling que llegó en el verano de 1989.

Peugeot 309

Con el paso del tiempo el Peugeot 309 se convirtió en un coche muy popular. Se fabricaba en Francia, Reino Unido y en España, en la planta de Valladolid. Destacó por su buena fiabilidad, bonito diseño y practicidad. A finales de 1992 el coche se preparaba para la llegada de su sucesor, el 306. Un compacto mucho más tradicional, desarrollado ya al 100% por Peugeot y que, de nuevo, fue un éxito mundial. 

Pero en la historia de Peugeot, el 309 siempre será especial. Nació de tres marcas míticas, empezó su desarrollo en otra marca y terminó siendo el punto de inflexión que necesitó la firma del León para atacar al Segmento C, un segmento que hasta la llegada de los SUV sería la piedra angular de su negocio.