Recordando a 'Vroom', el pionero de los juegos de Fórmula 1

Videojuego Vroom (1991)

Una joya de principios de los 90 

Ya hemos hablado con anterioridad de los videojuegos de coches, y también de videojuegos ya considerados clásicos que han formado parte de la infancia de muchos. En esta ocasión os venimos a hablar de un título quizás no tan conocido como la primera entrega de ‘Need for Speed’, pero que también tuvo una gran importancia en los juegos de carreras.

‘Vroom’ se lanzó en 1991 para el Commodore Amiga y se basó en una versión temprana creada por el desarrollador francés Daniel Macré. La premisa eran las carreras de Fórmula 1, quizás no enfocadas a la simulación, pero con la mayor dosis de emoción que podían transmitir los videojuegos del momento.

Con todo el realismo de un juego de 16 bits, puede que no esté a la altura de los mejores juegos de velocidad actuales, pero cumplía de sobra con las expectativas a comienzos de los 90. Contaba con seis circuitos que, si bien no eran oficiales, eran representaciones de trazados reales como Silverstone o Fuji. Además, incluía sorprendentes detalles que aportaban realismo a la hora de jugar como el consumo de combustible de los coches, el desgaste de las ruedas e incluso la explosión de los motores cuando éstos se dañaban.

No hace falta decir que muchos títulos actuales no cuentan con estos elementos en la actualidad, por lo que en aquel momento la sorpresa fue aún mayor. Por ello, en 1993 ‘Vroom’ obtuvo una secuela que a su vez terminó siendo el primer videojuego con licencia oficial de la F1. Tenía 12 circuitos reales, pilotos que competían en esa temporada y patrocinadores reales, por lo que las sensaciones eran ahora mucho más completas.

Aun así, el primer título fue el más especial incluso con esos detalles que no eran tan cómodos a la hora de jugar. Por ejemplo, para girar el coche no utilizaríamos una especie de joystick como en otros títulos, sino el ratón del Commodore, pero supongo que todo era cuestión de acostumbrarse. Al fin y al cabo, cumplía con su cometido: hacernos sentir como pilotos de Fórmula 1 desde casa.

Etiquetas: Videojuegos, Motor