Volkswagen no dejará morir al Golf y su novena generación será 100% eléctrica

Prueba del Volkswagen Golf R

Gustavo López Sirvent

Podría llegar entre 2028 y 2029...

"No dejaremos morir al Golf". Con estas palabras se expresó el CEO de Volkswagen, Thomas Schafer, respecto al futuro de uno de los iconos de la marca alemana. Así se lo hizo saber a nuestros compañeros de Autobild hace unos días. El jefe de la marca alemana ahondó en el tema diciendo que la novena generación de este compacto será 100% eléctrica.

Antes de que llegue la electrificación total del citado vehículo, va a haber un restyling que abra la puerta a lo que ha de venir y no tardará mucho en aparecer. “Actualizaremos el Golf ahora en 2024, será una revisión del nuevo modelo”, destacó Schafer.

Dentro de la entrevista que realizó nuestra revista hermana dio detalles de cuándo llegaría la siguiente generación (que podría llegar en 2028-2029) y con qué tecnología: “Estamos trabajando en un porfolio para ver cuál será el sucesor del Volkswagen Golf actual. Y desde mi punto de vista, no será uno con motor de combustión. Debe ser un vehículo eléctrico”.

A pesar de que Volkswagen ya tiene un coche eléctrico del mismo segmento del Golf, el ID.3, la marca pretende que ambos no rivalicen y puedan coexistir en el mismo mercado teniendo cuotas de clientes diferentes, como ya hacen otras marcas como Toyota con el Prius y el Corolla.

El Golf ya fue eléctrico en la séptima generación

Volkswagen e-Golf

Volkswagen ya construyó un Golf eléctrico durante la séptima entrega de esta saga. Fue el e-Golf, que se vendió en Estados Unidos, Europa y algunos países asiáticos. Tenía 116 CV (85 kW) y 270 Nm de par. Aceleraba de 0 a 100 km/h en 10,4 segundos y tiene una velocidad máxima, limitada electrónicamente, de 140 km/h, con una autonomía de 190 km en ciclo europeo NEDC.

Ese eléctrico se lanzó en 2014 y se dejó de fabricar en 2020. Tuvo unas ventas de 145.000 vehículos y dio paso al ID.3, que comenzó a fabricarse en la planta de Dresde. Fue uno de los coches más comercializados en países como Alemania o Noruega, si bien se vio superado por las mejoras de otras marcas.

Lo que se conseguiría con el lanzamiento del nuevo modelo eléctrico del Golf sería primero, la continuidad de esta nomenclatura, que tanto éxito ha dado a la marca durante casi 50 años; y segundo, que la compañía evite enfrascarse en la fabricación de nuevos propulsores de combustión interna que superen la homologación de la nueva anticontaminación Euro 7.