El motor del primer BMW M5 era el del M1 y otros datos molones del modelo

BMW M5 E28

¿Y M88/3 te dice algo?

Si no te gusta el BMW M5 es que no tienes corazón. Pero seguramente para el resto de la humanidad, la berlina grande deportiva por excelencia tiene un huequecito en su corazón.

Coches deportivos

Coches deportivos

Los coches deportivos nos hacen soñar despiertos: grandes prestaciones, promesa de sensaciones al volante, de una conducción sin igual. Los hay grandes, pequeños, bonitos, feos, caros y baratos. Pero todos ellos tienen en común una cosa: si merecen la pena, están aquí. ¡Sigue el link!

Para serte honesto, mi M5 favorito es el BMW M5 E39 (aquí algunas curiosidades). Ese V8 de 400 CV me impactó en mi adolescencia del mismo modo que a otros les marcó de por vida algún cantante de OT. Cosas de los nuevos tiempos.

Pero ese E39 no era el primer M5 que existía; ni tampoco el segundo. El honor de inaugurar una estirpe que aún hoy perdura es el BMW M5 E28, que apareció en en 1984 y vivió hasta 1988

El BMW M5 E28 se basaba en el chasis del M535i, que son palabras mayores. Tanto, que muchos aficionados prefieren esta versión a la de M Motorsport. Se presentó en el Salón del Automóvil de Ámsterdam en 1985, unos meses después de su puesta en producción.

El M5 E28 es especial por muchas razones. No solo porque fue el primero. También porque se hacía a mano y porque se siguió vendiendo incluso después de que la producción del Serie 5 E28 parase por completo. Bueno, también había otro punto por el que el BMW M5 E28 era especial: el motor. Veamos por qué.

El motor del primer M5, el M88

Si eres un friki insoportable de esos que nos sacan los colores cada vez que escribimos algo de BMW, ya sabrás que para leer eso de M88 hay que hacerlo de pie, con la mano derecha en el corazón y mirando al horizonte. 

Y es que con esas siglas se conocía al motor del BMW M1. El original. El bueno. El que no te compras por menos de 500.000 euros. El M1; ese deportivo que iba a fabricar Lamborghini.

El BMW M1 llevaba el motor M88 que sirvió de base al M5 E28. Foto: Top Gear
El BMW M1 llevaba el motor M88 que sirvió de base al M5 E28. Foto: Top Gear

Se trata de un bloque de fundición de seis cilindros en línea con distribución por cadena, inyección Kugelfischer, culata de aluminio y 3.453 cc. En el M1 la potencia era de 272 CV, aunque en el M5 era mayor.

Y es que el BMW M5 E28 utilizaba la versión M88/3 de ese seis cilindros. Las ventajas de los hermanos menores, que siempre se benefician de los avances de los mayores. En este caso, el 88/3 cambiaba la inyección Kugelfischer por una Bosch Motronic para alcanzar una potencia de 286 CV a 6.500 rpm y 340 Nm a 4.500. Otros datos interesantes era su elevada potencia específica, de 83 CV/litro: no olvidemos que es un coche de 1984.

En su día el M5 E28 fue el sedán más rápido del mundo con sus 250 km/h, aunque las pruebas de la época aseguraban que superaba esa cifra. Lo cierto es que el motor lo tenía relativamente fácil, porque apenas tenía que mover 1.500 kilos, lo que da una relación de 5,6 kg/cv.

Si te interesa el BMW M5 E28 y decides lanzarte a por uno, quizá lo tengas complicado: es uno de los BMW M más escasos, ya que solo se hicieron 2.241. Solo el M1 (456 unidades), el M5 Touring E34 (891) y el 850 Ci (1.510 unidades) lo superan en exclusividad.

Etiquetas: coches clásicos