El motor rotativo está de vuelta. ¡Estas son sus ventajas!

El glorioso motor Wankel
¿Lo veremos finalmente en el Mazda RX-9?

El Salón de Tokio 2017 está a la vuelta de la esquina (¿has visto las friki-novedades de Suzuki?)y será entonces cuando parece que veremos los planes futuros del Mazda RX-9 y del añorado -por algunos- motor rotativo. Hay ganas de saber más de este proyecto, pero antes de saber más de este futuro coupé de alta gama, deja que primero te hable de algunas de las ventajas del motor rotativo, ventajas que son interesantes y que por eso arrastra a muchos seguidores. ¡Estas son!

Simplicidad

El motor rotativo es más simple y cuenta con menos piezas que un motor convencional. Esta es la principal clave sobre la que se sustentan buena parte del resto de ventajas. Esta ausencia de piezas hace que sea una mecánica fiable y es muy complicado que el motor pueda tener un fallo masivo que lo inutilice en un momento dado. El principal problema que puede tener es que el rotor pierda estanqueidad y pueda tener un funcionamiento errático y menos eficaz, pero el coche difícilmente se quedará tirado por culpa de la mecánica.

Tamaño y peso

Otra de las grandes ventajas de este tipo de mecánicas es su tamaño compacto y su inferior peso, debido en parte a esta simplicidad y a las pocas piezas que utiliza para generar energía. 

Gran eficacia

Un motor rotativo es capaz de generar energía con una mayor eficacia que el motor con cilindros tradicionales. Hoy en día, gracias a la sobrealimentación, las pequeñas mecánicas ya son capaces de producir una interesante cifra de potencia y par, pero no te olvides de una mecánica como la del RX-8: 1,3 litros, dos rotores y 231 CV.

 

Suavidad

Al no haber piezas sueltas y solamente una pieza móvil que gira siempre en el mismo sentido las vibraciones y la suavidad de funcionamiento del motor rotativo es mayor que el de un motor con cilindros. El rotor está perfectamente equilibrado con contrapesos y la suavidad de funcionamiento también se incrementa gracias a una entrega de potencia mucho más progresiva.

Más revoluciones

Cada etapa de combustión del rotor dura 90 grados, mientras que cada vuelta del rotor son tres del eje, por lo que el proceso de combustión completo dura 270 grados, a diferencia de los 180 grados del motor tradicional. Esto tiene diferentes ventajas, como por ejemplo la eficacia de la que antes hablábamos, pero también tiene otra: estos motores son capaces de alcanzar altos régimen de revoluciones, generando un sonido realmente sugerente, algo interesante cuando hablamos de un vehículo deportivo o de altas prestaciones.

Queda por ver cómo evoluciona Mazda el motor rotativo: algunas fuentes afirman que podría contar con un turbocompresor para optimizar, especialmente, su eficiencia en cuanto a consumos y emisiones, una de las grandes pegas de este tipo de mecánicas. Lo que está claro es que Mazda quiere ser diferente y está siendo muy valiente para intentar modernizar un motor infrautilizado e intentar hacerlo tan eficaz como los motores tradicionales. ¡Un aplauso por aquí!

Etiquetas: Motor rotativo