La parrilla de los BMW M3 y M4: ¿realmente es tan desmesurada hoy en día?

Prueba del BMW M4 Competition Coupé

Javier López

Porque polémicas sí que lo han sido

El sector automovilístico está experimentando importantes cambios en todos los sentidos, incluso en el estético. Y es que los cánones de diseño avanzan y están, en cierta manera, orquestados por la batuta del mercado, dando creaciones así de todo tipo en busca de deleitar y, al mismo tiempo, ofrecer importantes innovaciones. Que funcionen o no ya es otra cosa.

Una de las más polémicas hasta la fecha ha sido la parrilla de los BMW M3 y M4, dos de los deportivos más esperados de la firma bávara. Pese a que se han recibido con ganas, ninguno de los dos ha pasado desapercibido ni ha evitado ser víctima de miles de memes y caricaturas en internet. Pero, ¿realmente se lo merecen?

Las parrillas de los nuevos BMW M3 y M4 a la palestra

Y es que, aunque es cierto que estas llaman poderosamente la atención por ser verticales, BMW no es la única marca que recurre a elementos XXL. Es tan sencillo como fijarnos en cualquiera de sus rivales de Audi, marca en la que predomina lo que se conoce como singleframe, una parrilla hexagonal de no precisamente dimensiones pequeñas.

Prueba del BMW M4 Competition Coupé

También podemos echar un vistazo a los coreanos, siendo Hyundai buen ejemplo de que las parrillas grandes tampoco son cosa de los alamenes. No pretendemos defender a BMW, marca que lleva desde hace tiempo recurriendo a estas peculiares -e innecesarias- dimensiones, pero es cierto que al final se han subido en el mismo tren que otras muchas firmas.

Y es que la propia firma alemana ha confirmado que su estrategia era precisamente esa, estar en boca de todos ya sea de manera positiva o negativa. Sin lugar a dudas, lo han conseguido, e incluso en cierta manera se mantienen fieles a su pasado, puesto que los nuevos M3 y M4 no han sido los primeros BMW en ofrecer una solución similar.

bmw m3 detalles

Entonces, ¿debemos lapidar sin piedad a la casa alemana? Lo cierto es que si lo hacemos por ese motivo, deberíamos ser consecuentes y hacerlo con todas, al fin y al cabo siguen unos mismos patrones ajustados a sus cánones. Y es que la demanda del mercado contemporáneo es querer pantallas más grandes, coches más grandes, llantas más grandes, así que ¿porqué no parrillas más grandes? Veremos cómo culmina esta tendencia que, de momento, no parece pasajera.

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