De la mente del creador del original MINI, Alec Issigonis, salió el Moke, un coche pensado como vehículo militar. El objetivo era que este pequeño todoterreno pudiera ser lanzado desde los aviones con paracaídas, y ser utilizado en tierra por el ejército británico. Dado que no consiguió este objetivo, fue reconvertido. Y tantos años después el Moke vuelve a fabricarse.

Se fabricó entre 1964 y 1993. Sus ruedas pequeñas y baja altura lo hacían poco práctico como vehículo todoterreno, así que fue reconvertido en un coche para el ocio. De este modo sus clientes, amantes de los buggy, comenzaron a llegar en masa, y se hizo tan famoso como otros nombres propios de estilo similar: el Citroën Mehari o incluso el Renault Rodeo.

Tras tantos años del final de su producción Moke International, propiedad de Fablink, ha decidido volver a lanzar el modelo, aunque lo hará en exclusiva para Reino Unido y en una tirada limitada. La interpretación del siglo XXI es ligeramente más grande y tiene cuatro plazas, ofreciendo más espacio para los ocupantes.

Y no es la única novedad. Por supuesto se adapta a los tiempos que corren, y aunque no monte la última tecnología si equipa dirección asistida, parabrisas calefactable o asientos tapizados de un material resistente al agua. Además, cuenta con capota de tela que cubre todo el espacio de los pasajeros.

Bajo su piel encontramos un pequeño motor de cuatro cilindros y 1.1 litros de cubicaje. Es de gasolina y desarrolla una potencia máxima de 68 CV, pudiendo montar un cambio manual de manera opcional. Y es que, de serie, viene con una caja de cambios automática de cuatro velocidades.

El fabricante tiene previsto construir únicamente 56 unidades, con un precio que rondará los 23.200 euros. Eso sí, todas ellas se venderán en Reino Unido.