Prueba del pequeño Ferrari Roma. Como en los viejos tiempos

Pequeño en sentido figurado, claro

Me preparo para la prueba del Ferrari Roma. Un GT que en Ferrari denominan compacto. También dicen de él que es un "un coche de F1 con ropa de noche" y la perfecta encarnación de la 'dolce vita'. 

También hemos probado el indescriptible Ferrari SF90

Si te paras a pensarlo, los GT han estado muy presentes en la marca desde el primer día, cuando Enzo Ferrari se dio cuenta de que las personas ricas pagarían generosamente por versiones domesticadas de sus deseados coches de carreras. 

El Roma representa el renacimiento de los Ferrari que encarnan el lujo discreto en lugar de ir mostrando su potencial a voz en grito; prioriza la elegancia por encima de la conducción más extrema. Es el cavallino ideal para las personas que realmente no buscan todo el poderío italiano, que no se describirían a sí mismos como conductores entusiastas. 

Maranello espera que el 70 por ciento de los clientes que se hagan con uno sean nuevos para la marca. El director de diseño de Ferrari, Flavio Manzoni, es discreto, astutamente revolucionario en su pensamiento, y a pesar de toda la inspiración a las películas de Fellini y Sophia Loren, el Roma es un coupé de aspecto progresivo y bellamente proporcionado. 

Los faros LED y la calandra son controvertidos, pero son los elementos que otorgan la "cara" de Ferrari en la década de 2020. Te acostumbrarás. En cuanto a los pilotos, usan una nueva tecnología que les permite minimizar su tamaño. 

Otra prueba de escándalo: Porsche 911 Turbo S con sus 650 CV

También son dignos de mención los alerones delanteros y el spoiler trasero desplegable, que tiene una configuración de baja resistencia, media carga aerodinámica y alta carga aerodinámica. 

Este es también un coche que se adapta a los colores sobrios. Lejos quedaron esos tiempos en que los deportivos de la marca se lanzaban exclusivamente en Rosso Corsa. Este es un Ferrari diferente para tiempos diferentes...

Prueba del Roma: ¿todavía se conduce como un Ferrari?

Los primeros rumores sugerían una evolución del Portofino, aunque más deportiva. Ferrari insiste en que no: el 70 por ciento de los componentes son completamente nuevos e incorpora las últimas técnicas de reducción de peso y producción. 

Coches deportivos

Coches deportivos

Los coches deportivos nos hacen soñar despiertos: grandes prestaciones, promesa de sensaciones al volante, de una conducción sin igual. Los hay grandes, pequeños, bonitos, feos, caros y baratos. Pero todos ellos tienen en común una cosa: si merecen la pena, están aquí. ¡Sigue el link!

El jefe de los pilotos de pruebas, Raffaele de Simone, destaca el trabajo de los ingenieros de chasis, lo cual es significativo porque si bien el Roma es un deportivo que te lleva menos al frenesí, no deja de comportarse como puedes esperar de un coche de la marca. Y es que es complicado que cualquier automóvil propulsado por un motor V8 biturbo de 3,9 litros que genere 620 CV sea algo menos que extremadamente ágil.

El motor del Roma tiene unas levas con un perfil de elevación más agresiva en admisión y escape. También un sistema de escape rediseñado que utiliza una especie de aleta de forma ovalada en lugar de un silenciador tradicional. Eso significa que sí, es más eficiente térmicamente, pero también (lo que en el fondo importa) suena mucho mejor. 

El V8 biturbo con 6120 CV del Ferrari Roma. Foto: Ferrari
El V8 biturbo con 6120 CV del Ferrari Roma. Foto: Ferrari

Aparte de que este V8 sea uno de los mejores motores del mundo, el mayor problema al que se enfrenta el afortunado usuario final es simplemente poder aprovechar su enorme potencial. 

Cualquier vestigio de turbo lag ha desaparecido por completo. La respuesta del acelerador es instantánea, y si no llega a las sensaciones que ofrecía el V10 de Lamborghini, está bastante cerca.

También tiene una nueva caja de cambios, derivada de la de ocho velocidades del SF90 Stradale. Ha mejorado en todos los aspectos: cambios más ligeros y rápidos (15% subiendo, 21% reduciendo), más eficientes y mejor integrados con el software del motor. 

Racional, pero a su estilo

Por supuesto, aunque yo esté más que excitado por probar un Ferrari Roma, lo cierto es que este tipo de sobrecarga emocional no es lo que buscan en Maranello. Por eso el resultado es un deportivo que es tan seductor conduciendo tranquilo como a 7.500 rpm

Lo disfruto por la región vinícola piamontesa que tiene carreteras parecidas a las que hay en los alrededores de la fábrica de Ferrari. Es decir: horribles. Y si a esto le añades una tormenta de proporciones apocalípticas, todo parece ir a peor.

La historia de las siete décadas de Ferrari

Los Ferrari anhelan el asfalto seco y necesitan temperatura adecuada en los neumáticos para mostrar su mejor cara. La combinación de superficies resbaladizas y fuertes lluvias supuso mi primera vez con el modo ‘Wet’ en el manettino

Funciona extremadamente bien, aunque esa luz de tracción parpadeante es un recordatorio de cuánto trabajo está haciendo el software. Confort, Sport, Race y ESC-OFF completan el quinteto, respaldado por algo llamado Ferrari Dynamic Enhancer, que ajusta la presión del freno en cualquier rueda que lo necesite y funciona solo en el modo Race, junto con el control de estabilidad y el control de deslizamiento lateral 6.0. 

Mira a ver si tienes lo que hay que tener para llegar a ESC OFF. En mojado. Foto: Ferrari
Mira a ver si tienes lo que hay que tener para llegar a ESC OFF. En mojado. Foto: Ferrari

Ferrari se ha vuelto verdaderamente digital, pero debajo de todo hay un automóvil muy satisfactorio para conducir, tanto a la hora de pisar a fondo (0-100 km/h en 3,4 segundos, 0-200 en nueve) como cuando vas relajado, con una dirección maravillosamente lineal, una compostura fantástica y unos frenos fabulosos. 

Quizás lo más relevante para las personas que realmente terminarán comprándolo es que sus modales en las autopistas también son ejemplares.

Interior del Ferrari Roma: aaaay, los controles táctiles

No todo en esta prueba iba a ser de color de rosa. Dentro del Roma es donde las cosas se ponen complicadas: se dejan de lado los botones de toda la vida en favor de los controles multitáctiles capacitivos. Sí, todos lo están haciendo, pero eso no quiere decir que esté bien. 

No hay nada de malo en la pantalla principal de 16”, curva y en alta definición que se puede personalizar. Pero para moverse por los menús hay que navegar con un panel táctil en el radio derecho del volante. El de la parte izquierda opera el control de crucero adaptativo. Mientras tanto, los intermitentes, los limpiaparabrisas y el manettino están al volante, al igual que los últimos 15 años. Tampoco es que sea ideal...

Para mí, lo peor del Ferrari Roma son el pulsador oculto de arranque del motor, el panel táctil para ajustar los espejos y el botón que abre la puerta. Preferiría interactuar con una pieza de metal o botón físico. 

Los dos problemas que impiden que haya un Ferrari eléctrico

Y ya que estamos, ¿no se puede tener un control 'real' de volumen y climatizador? Los dos se manejan en la pantalla central de 8,4 pulgadas, lo que significa que estás destinado a buscar dibujitos punta de los dedos... en gran parte en vano. 

La pantalla central en sí misma parece que se puede ocultar, pero obviamente no. Ferrari dice que todo esto está al servicio del típico mantra "ojos en la carretera, manos en el volante", y sus pruebas biométricas demuestran empíricamente que apenas hay distracción. No conmigo al volante...

Más datos: así es el Ferrari Roma 2020

Siguiendo con el habitáculo, tiene un aire agradable y está destinado a involucrar más al acompañante en la experiencia. 

Para terminar con esta prueba, hay que reconocer que era poco probable que Ferrari se equivocara con el Roma. Siempre hay algo seductor en un pequeño (más o menos) Ferrari con un motor V8 montado en la parte delantera, en lugar de en el medio, tal como lo hicieron en los primeros días de la compañía. Dinámicamente cubre todas las necesidades: como corresponde a un buen Gran Turismo, podría transportarte a ti y a un pasajero afortunado a través de un continente entero con facilidad máxima y no se avergonzaría si hubiera un circuito en el otro extremo.

Nuestro veredicto

8

Etiquetas: Superdeportivos