Así era el BMW Z3 Coupé: un roadster cerrado para inconformistas

BMW Z3 Coupé

El BMW Concept Touring Coupé nos ha recordado al icónico Z3 Coupé, uno de los modelos más interesantes de la marca alemana.

La reciente presentación del BMW Concept Touring Coupé ha hecho que muchos recordemos un coche que sorprendió a muchos a finales de los 90 y principios de los 2000. Se trata del BMW Z3 Coupé, una peculiar variante del descapotable de la marca alemana que se ha convertido en uno de sus coches más queridos. Así era este modelo.

Antes de hablar de esta configuración, hay que hablar del Z3 descapotable, que llegó en 1995 como la reinterpretación del concepto del BMW 507 de los años 50. Como aquel coche, este pretendía traer consigo unas formas atrevidas y se configuraba con un estilo basado en unos rasgos claros: un morro largo, una trasera y voladizos cortos, así como una posición de conducción atrasada.

Con esto, el coche llegó a mediados de los 90 y lo hizo convertido en el coche de James Bond en la primera película protagonizada por Pierce Brosnan: Goldeneye. De hecho, incluso se lanzó una edición especial de 007 en Estados Unidos limitada a 20 unidades y, con todo, el nuevo descapotable de BMW gozó de una buena acogida desde el primer momento.

A principios de 1996, las 15.000 unidades de la producción anual del coche ya se habían vendido, pero todavía quedaba mucho por delante. Por ejemplo, la mecánica contaba originalmente con motores cuatro cilindros de 115 y 143 CV, pero luego llegaría un seis cilindros de 193 CV. También hubo una versión M con el motor del M3 E36, con 321 CV.

BMW Z3 Coupé: rompiendo los esquemas

Aun así, no solo iban a llegar novedades en forma de motorizaciones. Si bien la carrocería roadster diseñada por Joji Nagashima era realmente atractiva, en 1998 se pensó en lanzar una versión cerrada. Así fue como se concibió el BMW Z3 Coupé, que tenía como inspiración el 328 Sportcoupé que ganó la Mille Miglia de 1940 con Huschke van Hanstein y Walter Bäumer.

Con esta variante, el estilo del coche se percibía totalmente diferente y su techo, combinado con las curvas formas de la carrocería, daba como resultado una apariencia realmente llamativa. De hecho, era casi cómica y por ello recibió el apodo cariñoso de ‘Clown Shoe’ o zapato de payaso, que es a lo que podía recordar.

Ahora bien, más allá de su peculiar aspecto, este era un coche muy interesante. Se ofreció solo con motores de seis cilindros, siendo el más básico el 2.8i de 193 CV. Por encima estuvo el 3.0i de 231 CV e incluso hubo dos versiones Z3 M Coupé con 321 y 325 CV. Una de estas variantes M llegó a ser el coche de seguridad de MotoGP en el año 2000, además.

BMW Z3 M Coupé
BMW Z3 M Coupé

Por otro lado, una versión especial de este modelo fue la llamada Millenium Edition, una unidad que fue sorteada entre los lectores de la revista alemana Auto Motor und Sport. Eso sí, si hablamos de configuraciones de edición limitada o unidades especiales, la versión roadster fue la más completa, llegando a contar con un prototipo Z3 M con motor V12 de 326 CV. Una locura.

Sin duda, podemos decir que este fue un modelo muy completo y fue capaz de cautivar a muchos en todas sus versiones. Aun así, el BMW Z3 Coupé siempre tendrá un lugar especial. Con apenas 18.000 unidades fabricadas, no es un coche común, pero eso lo hace aún más interesante. Ahora queda por ver si tendrá un sucesor con el Concept Touring Coupé, algo que no parece descabellado…

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