Niron, junto con GM y Stellantis diseñan el primer imán para motores eléctricos de 'tierra limpia'

motor eléctrico sin tierras raras

Gustavo López Sirvent

La asociación de estas tres empresas ha conseguido que se cree un imán que sustituya las tierras raras de los imanes permanentes que se necesitan para los rotores de los motores eléctricos por un material abundante y asequible como es el nitruro de hierro.

Con el fin de ganar en ligereza, eficiencia y practicidad hay marcas y laboratorios que investigan hasta el más mínimo detalle. Tal es el caso de General Motors y Stellantis, que se han unido a Niron Magnetics (una startup estadounidense) para crear el primer motor eléctrico de imanes de 'tierra limpia'. 

En la actualidad existe un problema relacionado con los materiales que se necesitan para fabricar los imanes permanentes del rotor de los motores eléctricos: las conocidas como 'tierras raras'

Aun así, hoy en día tecnologías como los motores de inducción sustituyen a los imanes por una alimentación externa para crear el campo magnético del rotor. También hay otras alternativas como la de la sustitución de las tierras raras por otros materiales como la ferrita. 

Ahora,  Stellantis, GM y Niron Magnetics garantizan que los imanes de tierra limpia que ha encontrado la start up americana sean los únicos libres de tierras raras capaces de generar suficiente energía como para instalarse en los coches eléctricos. 

Y es que Niron Magnetics vio la luz en 2014 con la intención de instaurar en el mercado la tecnología magnética fundamentada en el nitruro de hierro, un material sostenible y accesible con facilidad.

General Motors contribuye al desarrollo de los imanes de Niron a través de inversiones en la empresa por medio de su división de inversión inicial, GM Ventures. La startup considera que su imán Clean Earth Magnet es el primero sin tierras raras capaz de generar energía para las necesidades de la automoción. 

Actualmente, Niron Magnetics se dedica a perfeccionar los procesos de fabricación necesarios para incrementar la producción de este imán sostenible.

Ventajas de prescindir de las 'tierras raras'

Las 'tierras raras' se componen de minerales como el neodimio, el terbio, el disprosio y el praseodimio, que se emplean en los imanes del rotor del motor y todos ellos presentan inconvenientes. El principal, que proceden, básicamente, de China, lo que supone inestabilidad en la cadena de suministro y fluctuaciones en los precios. 

Por si fuera poco, la prospección y tratamiento de estos minerales dejan una huella ambiental muy pronunciada.

La Universidad de Minnesota fue la que arrancó estas investigaciones y Niron la continuó.La conclusión es que la tecnología de imanes de nitruro de hierro no depende de estos materiales, presentándose como una alternativa más sostenible y económica. 

El hecho de que el hierro natural y el nitrógeno sean elementos comunes que se pueden conseguir con relativa facilidad por diferentes lugares del planeta, podría evitar los impactos meidoambientales y las dificultades que existen en la cadena de suministro cuando nos referimos a las 'tierras raras'.

Una de las características fundamentales del nitruro de hierro es que tiene un campo magnético más potente que los componentes imantados de las tierras raras. El efecto que se consigue es que los propulsores fabricados con este mineral sean más ligeros, compactos y eficientes en comparación con los que se está trabajando en la actualidad. 

Esta pecularidad sería la que significara una gran diferencia entre los imanes de nitruro de hierro y los de ferrita (también sin tierras raras) que generan campos magnéticos menos potentes y requieren diseños de propulsores más grandes y pesados.

Etiquetas: Motor, Tecnología