Un hallazgo de niobio en China puede variar el concepto de las baterías de los coches eléctricos

niobio

Gustavo López Sirvent

Este mineral raro puede servir para fabricar baterías de niobio-grafeno que incrementen la duración de la pila 10 veces más que una de litio, es decir, que tenga un rendimiento de más de 30 años. El niobio había sido utilizado en China para su importación a la industria siderúrgica, pero ahora puede cambiar la historia de los coches eléctricos.

China se ha convertido en una mina (nunca mejor dicho) a la hora de explotar yacimientos para la extracción de tierra raras, que luego permiten producir baterías de iones de litio. Pero no conformes con este material han seguido buscando nuevas alternativas que mejoren y haya suficiente cantidad para fabricar las pilas del futuro.

Los investigadores chinos se han encontrado con un diamante en bruto, con un mineral no visto hasta la fecha y que podría poner patas arriba la movilidad eléctrica: se trata de la niobobaotita, y es rica en niobio, a la sazón un metal superconductor que gracias a su composición, podría favorecer la producción de baterías más duraderas, eficientes y seguras que las ya existentes.

Este hallazgo tiene su ubicación a 90 kilómetros al sur de la frontera entre China y Mongolia, en uno de los mayores yacimientos conocidos de tierras raras, la región minera de Bavan Obo, en Mongolia Interior. 

Una vez han dado con este tesoro, los investigadores de aquel país se han puesto manos a la obra para tratar de desarrollar unas nuevas baterías den niobio-grafeno que incrementen la duración de las baterías 10 veces más que las vigentes de iones de litio, es decir, que tengan un rendimiento de más de 30 años. 

El hecho de que no contengan sustancias inflamables, les permite tener una carga más rápida, con un mayor rendimiento y, sobre tod, con más seguridad.

El niobio se utiliza en China para importarlo a la industria siderúrgica, pero si el descubrimiento ha sido abundante, es probable que se derive hacia el sector automotriz para destinarlo a las baterías de coches eléctricos y autoabastecerse. 

Este mineral tiene su gran fuente mundial en Brasil (con el 90% de las reservas conocidas) y Canadá, por lo que China podría sumarse a ese mercado.

La cada vez mayor escasez del litio, a la vez que el niobio puede aportar mayor eficiencia, provoca que estemos, si los científicos consiguen dar con la tecla, ante un elemento clave para las nuevas generaciones de baterías. 

El uso que está teniendo el niobio en la actualidad se destina a mejorar la resistencia del acero, por lo que su utilidad está destinada a los cohetes o los motores a reacción. Esta historia podría cambiar en breve para dirigirla hacia los vehículos eléctricos.