Este es el hermano gemelo del Mercedes Clase G. Chino, ¡claro!

Beijing BJ80 lateral
¿Pensabas que uno de los coches más míticos de la historia no tenía copia china? ¡Já!

El Mercedes Clase G chino te puede hacer estremecer, así que antes de leer esta noticia, toma asiento. Te lo presento: se llama Beijing BJ80 y se trata de un todoterreno robusto (o al menos eso parece) que tiene poco o nada en común con el Mercedes Clase G, el auténtico. Bueno, quizás la principal similitud sean sus formas, especialmente desde la vista lateral: cuadrado y con pasos de rueda marcados.

Las proporciones son bastante similares com el Mercedes original: mide 4,78 metros de largo, apenas 3 centímetros menos que el Clase G original, además de 1,85 metros de ancho y 1,97 de alto: la anchura es donde más se diferencia con el original, ya que pierde 8 centímetros. Su plataforma es de 2,8 metros y a nivel técnico no tiene nada que ver con el modelo alemán, ya que renuncia al eje rígido trasero y todo parece indicar que no permite el bloqueo de los tres diferenciales, como el original.

No obstante, da bastante el pego. ¡Incluso cuenta con versiones tuteadas e incluso una espectacular réplica del Mercedes-AMG G63 6x6, sí, con tres ejes. ¡Qué grandes estos chinos! No se cortan lo más mínimo a la hora de copiar. En el interior, la cosa cambia notablemente, ya que poco tiene que ver con el alemán en cuanto a diseño o calidad de materiales y ajustes: a nivel estético, incluso me recuerda más al Toyota Land Cruiser, ¡puestos a copiar!

Se trata del modelo más caro y exclusivo de esta marca china, la misma que tiene en su gama el coche eléctrico más vendido del mundo. En cuanto a la gama mecánica del Beijing BJ80, a día de hoy tenemos un 2.3 litros (y origen Saab) y un 4.0, todos de gasolina: al parecer, ya están empezado a incorporar a la gama una versión híbrida enchufable capaz de producir 250 CV y 350 Nm de par. No, todavía no han imitado una versión AMG, al menos que sepamos.

Los chinos son expertos en la materia y ni siquiera los grupos más grandes, como BAIC/Beijing, se salvan de las copias más descaradas. ¡Qué valor tienen!

Aquí, la gama del Mercedes Clase G, ¡el pata negra!