Prueba Skoda Karoq 2017 2.0 TDI 150 CV 4x4: ¡tiembla Seat Ateca!

Llega más de un año después de que lo hiciera el Seat Ateca, pero el primo Skoda Karoq llega dispuesto de demostrar que los últimos serán los primeros. ¿Lo conseguirá?

Para ser sinceros, no es la primera prueba del Skoda Karoq. Y es que ya hace seis meses, ya tuve la oportunidad de probar varias unidades preserie del nuevo Karoq. Quien firma estas líneas se llevó unas buenas sensaciones.

Para empezar me gustó el diseño adoptado, para olvidarse de las líneas cuadradotas y algo vulgares que gastaba el Yeti –modelo al que sustituye en cuerpo y alma–. Un traje nuevo, que le sienta de maravilla, pero que, le pese a quien le pese, hay que ser un auténtico lince para lograr diferenciarlo de su primo en Seat, el Seat Ateca, un modelo que ha gozado de un año de ventaja para luchar en el competido corral de los SUV compactos, y que ahora va a tener al enemigo en casa. Digan lo que digan los responsables del Grupo VW.

En cualquier caso, en el interior del Karoq sí se identifican importantes diferencias. En primer lugar por las soluciones ‘simply clever’ que, combinadas con el generoso número de huecos portaobjetos, hacen del Karoq un coche especialmente práctico. Pero el gran aspecto distintivo y joya de la corona –heredada del Yeti, que quede claro– es el sistema de asientos VarioFlex (320 euros en opción), consistente en que la fila trasera se divide en tres plazas individuales que se pueden desplazar longitidunalmente de forma individual (hasta 150 mm), plegar en varias posiciones e, incluso extraer fácilmente. Además, si, por ejemplo, se extrae la plaza central, los asientos exteriores pueden desplazarse hacia el centro 80 mm. ¡Bravo, señores de Mlada Boleslav! Y precisamente gracias al sistema VarioFlex, el maletero, con un volumen mínimo de 521 litros y un máximo de 1.630, puede ampliarse hasta los 1.810.

Motores del nuevo Skoda Karoq

El nuevo Skoda Karoq está disponible inicialmente con 4 motores (en 2018 se une el motor TDI de 190 CV): dos gasolina TSI (1.0 triclíndrico de 115 y un 1.5 con desactivación automática de cilindros de 150 CV) y dos diésel TDI (1.6 de 115 CV y un 2.0 de 150 CV).

He estado probando el Karoq con el propulsor 2.0 TDI 4x4 con el fantástico cambio DSG y que, montaba el virtual cockpit –que no estará disponible hasta el año que viene y que recomiendo encarecidamente–. El motor 2.0 TDI de 150 CV, además de ser un viejo conocido de la casa VW, es el compañero ideal para todo tipo de viajes, ya sea por lo negro o fuera del asfalto, en especial a su modo de conducción Offorad -Snow (solo disponible con la tracción 4x4), que le permite moverse sin problemas por terrenos complicados. Este motor empuja con ganas desde muy bajo régimen y en carretera lo da todo sin rechistar., Además, con el cambio DSG –y levas detrás del volante– el viaje se convierte en una experiencia placentera… incluso aunque la carretera esté hecha un cristo, como ha sido la prueba por carreteras sicilianas…

Si he ponerle un pero es el sonido que llega al interior con el motor frío: demasiado petroleta… Pero por lo demás el Karoq es un coche redondo, sin apenas balanceos en curvas es limitado gracias al Control Dinámico del Chasis (DCC, y a pesar de su peso (casi 1,5 toneladas), el conjunto se detiene firmemente.

Precios de lanzamiento del Skoda Karoq

Los mejores todoterrenos baratos de 2018

En cuanto a precios, el nuevo Skoda Karoq está disponible desde 19.700 euros para la versión 1.0 TSI Ambition con cambio manual (no hay acabado de acceso; 21.700 con DSG), que incluye 3.700 euros en equipamiento (climatizador bizona, Care Connect, pantalla táctil de 8’’, Front Assist, cámara trasera…). El Skoda Karoq 2.0 TDI 150 CV 4x4 Style asociado al cambio DSG –como el que he probado– cuesta 35.470 euros. Casi nada..

Nuestro veredicto

8

Etiquetas: SUV compacto