Normalmente, cuando hablamos de subastas de coches, hablamos de una unidad en concreto. Sin embargo, este es un caso especial, ya que la subasta de Villa Erba que RM Sotheby’s celebrará el próximo 20 de mayo te dará la oportunidad de comprar cinco Ferrari Testarossa pintados de negro. ¿Por qué conformarse con uno?

Puede que te estés preguntando para qué querrías cinco ejemplares de este Ferrari. Salvo que te llames Sonny Crockett o seas un amante del Testarossa, puede que no tenga mucho sentido, pero en realidad no se trata de coches exactamente iguales, por mucho que pueda parecer que sí. 

Todos estos ejemplares forman parte de la denominada colección Black on Black y, como ese nombre indica, todos está pintados de negro y tienen el interior en el mismo color. Eso es común en las cinco unidades, pero cada una de ellas tiene unas características y, en conjunto, representan la historia del Ferrari Testarossa desde que se lanzó a mediados de los 80.

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Cinco Ferrari Testarossa de color negro salen a subasta (5 imágenes)

El primero de ellos es de 1986 y se trata de la configuración original de este superdeportivo italiano. Es decir, este es un Testarossa ‘Monospecchio’, llamado así por su único espejo retrovisor colocado en el pilar A. Esto generó mucha controversia en su momento y, años después, fue cambiado. Por ello, en la página de la subasta se espera que esta unidad se venda entre 120.000 y 180.000 euros.

Tras él se sitúa un ejemplar de 1987, año en el que ya la marca de Maranello colocó dos espejos colocados en una posición más baja. Esto hace que esta unidad sea más convencional, aunque es un ‘Monodado’, en referencia a sus llantas de una tuerca que también montaban los modelos anteriores. Así, también se estima que se venda por la misma cantidad que el de 1986.

Por otra parte, en esta subasta también se ofrecerá una unidad de 1989, ya con llantas de cinco tuercas. Por esta razón, se espera que se venda por un valor situado entre 100.000 y 150.000 euros, ya que no es tan raro. Sin duda, una cifra menor que la estimada para el 512 TR de 1992 que también se ofrece, el cual se espera que alcance un máximo de 250.000 euros.

Aquel modelo ya no fue llamado Testarossa como tal y las líneas del coche se intentaron modernizar con unas llantas mayores y un paragolpes más noventero que quizás no cuadraba tan bien con el resto del coche. No obstante, el que más varió respecto del modelo original es el coche más nuevo y raro de esta pequeña colección: un F512 M de 1996.

Tan solo se fabricaron 501 ejemplares de esta variante y estéticamente se caracterizaba por montar unas nuevas llantas, un frontal que recordaba al 355, la ausencia de faros escamoteables y unos pequeños pilotos redondos atrás. Eso sí, lo mejor estaba en la técnica, con un aumento de la potencia de su motor V12 hasta los 440 CV y ajustes como la inclusión de un sistema ABS.

Ese fue el coche que marcó el final del Ferrari Testarossa, que fue lanzado 12 años antes. Por lo tanto, podemos decir que esta colección es la representación de la vida de este modelo. En el caso de este último ejemplar, se espera que alcance hasta 300.000 euros por su rareza, así que más te vale ahorrar si quieres este o cualquiera de los otros. ¿Por cuál te decantarías?