Cinco trucos infalibles para conservar un motor de gasolina sin averías

Motor de 6 cilindros en línea de BMW M3 E36.

Trucos y cosas a tener en cuenta.

Mantener tu coche en buen estado es una tarea sencilla. El mantenimiento es un apartado de vital importancia dentro del uso normal de tu coche, respetando siempre los periodos indicados por el fabricante. Además, hay trucos que permitirán que tu motor tenga una larga vida. Aquí cinco trucos infalibles para conservar un motor de gasolina sin averías.

Tu motor aguantará que estés constantemente acelerándolo y parándolo. Pero, la pregunta es, ¿hasta cuándo? A corto plazo te permitirá que lo hagas, pero pasados unos años este tipo de conducción habrá afectado a ciertos elementos que acortarán la vida útil de tu motor. No es bueno tener constantes paradas y arranques, pues el motor se desgasta. Mantén una velocidad constante.

La mayoría de nosotros esperamos al último momento para repostar. Actualmente, con los precios de la gasolina por las nubes ir a la gasolinera es, cuanto menos, todo un lujo. Pero si siempre esperamos a que la capacidad este al borde del límite podremos acortar la vida del motor. La gasolina tiene una serie de sedimentos que van asentándose poco a poco y se acumulan en el fondo. Con los años podríamos tener problemas si nuestro motor succiona los mínimos del depósito.

El tercer truco es muy fácil y sencillo. Simplemente basta con activar los sentidos cada vez que vamos a coger nuestro coche. Mira bien que no haya gotera y concéntrate el percibir algún olor diferente. Puede que haya filtraciones por aceite o refrigerante. Si una fuga deja sin líquido algún elemento del motor que lo necesite, esto producirá desgaste y nos llevará a una avería importante.

Motor W12 del Bentley Continental GT

Bentley

En el cuarto truco cobra especial importancia el mantenimiento de tu coche, algo primordial. Entre tantos elementos que cobran especial importante está el filtro de aire, que es el encargado de que exista la buena ventilación y evitar que se retengan insectos, partículas o polvo. Preocúpate de que se sustituya las veces que indica el fabricante.

Parece “de cajón”, pero algunos conductores no tienen en cuenta el último truco. Que tu motor cuente con aceite de calidad y con líquido refrigerante es de vital importancia. El primero debe ser sustituido de forma periódica, siempre utilizando el recomendado por el fabricante. El segundo debe estar siempre al nivel recomendado. De lo contrario nos enfrentaremos a una avería de importancia.