Habría que pedirle explicaciones al propietario de este Chevrolet Corvette Convertible del 1972 guardado en un garaje (casi) desde entonces. ¿Qué ha motivado un comportamiento tan 'inhumano' con esa joya? El pobre Chevy se ha pasado más de cuatro décadas acumulando polvo en su musculosa chapa en Pensilvania (Estados Unidos). Tanto es así que solo se libró del cautiverio durante 1.556 km. ¡Qué vida más triste para él! Sería como mantener a un purasangre encerrado en una jaula 

Al parecer todo el lío comenzó cuando Jim Kevan, que así se llama el ínclito dueño, se compró el deportivo. Por aquel entonces el mirlo tenía 22 años -el hombre, no el vehículo- y dejó atrapar por las 'garras' de un vendedor que le 'colocó' el carrazo. El problemilla vino cuando Jim trató de asegurar el Chevrolet Corvette. Le informaron de que la póliza costaba 1.200 dólares, por los 6.200 'pavos' que había soltado por su flamante muscle car. Así las cosas, a punto de casarse y recién comprada la casa, no le quedó más remedio que recluirle en su aparcamiento. Y de forma muy sensata, no se arriesgó a conducirlo sin cobertura legal.

Hasta ahí, vale. Pero hay que decirle al amigo Jim que ha tenido cerca de medio siglo para ahorrar para el seguro. Ya sabes, estas son cosas que pasan al otro lado del Atlántico.

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Fotos: historia Chevrolet Corvette (6 imágenes)

Foto portada: Wikipedia.