Antes de preguntar cuántos árboles han usado en hacer el Toyota Setsuna, debes admitir que es bonito y original. Por eso se enseñará al público por primera vez durante la Semana del Diseño de Milán que se celebra durante este mes.

El coche de madera es un roadster biplaza que ha representado un buen esfuerzo para los diseñadores e ingenieros de Toyota, aunque sólo sea en la elección de las distintas maderas para cada componente. La carrocería mide sólo 3,03 metros de longitud, 1,48 metros de ancho y 0,97 metros de alto. La distancia entre ejes es de 1,70 metros, cuenta con capacidad para dos ocupantes y no tiene techo.

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El Toyota Setsuna está revestido de cedro japonés, ya que es el mejor material para el exterior debido a la finura de su grano y flexibilidad. Para la rigidez, el chasis está hecho de abedul, mientras la zelkova japonesa aparece en el suelo (debido a su resistencia y durabilidad) y los detalles de aluminio se usan en las tapas de las ruedas, el volante y bastidores de los asientos.

La carrocería del coche de madera está hecha de 86 paneles hechos a mano y se une mediante la técnica tradicional de carpintería japonesa ‘okuriari’ que reduce el uso de clavos y tornillos. Las diferentes maderas también han sido tratadas de modo que su coloración y apariencia cambia con el tiempo. Se expande en los inviernos húmedos y se contrae en los climas secos.

Impulsado por un motor eléctrico del que no se tiene datos, el Toyota Setsuna es una maravillosa mezcla de lo retro y lo nuevo. Y además, si le quitas las ruedas sería un barco perfecto.

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